Es una costumbre que al llegar a la capital de Corea del Sur te enamores a primera vista de la modernidad de sus edificios, pero también del contraste perfecto que guardan los Palacios de Seúl, esas hermosas pagodas que siguen de pie para recordarle a los coreanos sus raíces.
Al hospedarte, lo recomendable es quedarse en el centro para que puedas caminar la ciudad a todas tus anchas; yo pienso que así te ubicas mejor y vas descubriendo poco a poco todos los rincones que en un transporte urbano te podrías perder.
En mi caso me hospedé en el hotel Makers el cual se ubica a unos pasos de la zona Jongno-gu un barrio lleno de comercios, restaurantes y boutiques en donde venden una gran cantidad de souvenirs y comida.
El hotel lo reservé y adquirí con puntos premier, entonces ese tema ya lo tenía solucionado, al igual que el aéreo y uno que oro tour en Seúl, como visitar la torre “N” o cocinar con una familia coreana, entre otras actividades.
Los 5 Palacios de Seúl
Este año lo visualicé, me propuse visitar los 5 Palacios de Seúl, perdiéndome entre las calles, los edificios, los mercados y las tiendas. Decidí que así sería porque también los viajes se tratan de explorar y disfrutar al mismo tiempo.
Creo que una de las formas más concretas de acercarme a una ciudad moderna, es reencontrarse con las raíces y descubrir esa parte cultural que a veces pasamos de largo y que está ahí, esperando ser descubierta.
La dinastía Joseon
La historia de Corea del Sur no se puede reconocer si no se habla de la realeza, como es el caso de la dinastía Joseon, el último reino de larga duración en la península coreana con un poco más de 500 años, (1392-1910).
Antes de que esta familia ocupara el trono, Corea pasó por varias dinastías: La Yuang, La Ming y la Koryo, en esta última se expulsaron a los mongoles, pero también era notable la inestabilidad coreana, pero eso requería de un cambio.
La dinastía Joseon fue fundada por el comandante Yi Sung-kei quien estableció el reinado Lee Joseon bajo la filosofía del confucionismo, desplazando entonces al budismo, basándose en el respeto y compromiso con el prójimo.
La educación era una habilidad de los gobernantes, se basaban en la sabiduría para unificar a la sociedad, fue así como corea creció con gobernantes sabios.
Un ejemplo de ello fue en el gobierno del cuarto rey -Sejong el grande- quien impulsó la formación del actual alfabeto coreano -hangul- dándole una identidad distinta a la cultura china.
Durante esta dinastía se impulsó a la ciencia y la tecnología, se especializaron en las ramas de agricultura, astronomía y navegación, por ello los coreanos se diferenciaron del resto de culturas.
Al no permitir el paso para invadir china, el reino coreano quedó devastado por los japoneses en una guerra que duró 7 largos años. A grandes rasgos esta historia podrás entenderla en tu próximo viaje a Corea del Sur.
Testigos de la historia recuperados
Los palacios tienen la particularidad de estar hechos de madera, arquitectónicamente representan pagodas o lugares de oración, en ellos vivieron las familias reales y su servidumbre.
En cada palacio se suele ubicar una sala de trono y un salón del consejo, ambos se ubican en el centro, pero también los cuartos residenciales y no pueden faltar los hermosos jardines.
La mayoría de estos lugares están cerrados los lunes y su horario habitual es de 9:00am a 17:00hrs. Algunos de ellos extienden sus horarios para aquellas personas que quieran visitarlos después de horarios de oficina.
Toma en cuenta antes de entrar
Tip: lo típico y lo mas natural es que te vistas con ropa coreana de “época” para visitar los palacios y tomarte unas muy buenas fotografías. La mayoría de los coreanos lo hace y tiene gran significado.
Para lo anterior afuera de los palacios hay tiendas en donde puedes rentar algún traje ya sea como guerrero, persona aristócrata o de la realeza.
Lo anterior puede ser un poco atrevido o divertido, depende de cómo lo veas, pero de eso se tratan los viajes, ¡de atreverse!
Tip: existe un pase para visitar los 5 Palacios de Seúl, el costo es de 10,000 wongs y una vez adquirido tienes tres meses para completar todas las visitas. ¿Los quieres conocer? Aquí la descripción de ellos.
Palacio Deoksugung
También llamado Palacio de la Longevidad Virtuosa, este conjunto de edificios historicos se estableció en terreno plano. En la puerta principal llamada Daehanmun se lleva a cabo el cambio de guardia tres veces al día.
No pierdas oportunidad de sentarte en una banca o banqueta para ver cómo las personas se divierten tomándose fotos o escuchando el trabajo de los guías que siempre tienen datos interesantes.
Por supuesto, el lugar es ideal para fotografiar flores de los jardines, pero sobre todo, el contraste de edificios antiguos y modernos.
Si asistes al cambio de guardia, debes ser muy respetuoso al ser testigo de este acto protocolario.
Una vez que la ceremonia termine podrás tomar varias fotografías con los guardias. Si tienes suerte podrás experimentar tocar el famoso tambor o Wong
Palacio Gyeonghuigung
En este hermoso lugar también conocido como el Palacio de la Armonía Serena vivió el rey Taejo, fundador de la dinastía Joseon.
Su función fue ser un palacio alterno en caso de que el palacio principal fuera evacuado y su importancia creció en el momento en que los reyes sucesivos vivieron ahí.
Cerca de ahí se encuentra el museo de arte del Palacio Gyeonghuigung y el museo de historia de Seúl.
Lo mas encantador de este Palacio es que cada estructura de madera tiene increíbles detalles pintados a mano donde resaltan los colores vivos. Así como las gárgolas y dragones en cada una de sus esquinas.
Sin duda alguna pasear por los senderos te invita a sentarte bajo la sombra de un árbol o simplemente a contemplar cada pincelada en donde se nota un trabajo muy minucioso de la talla y el decorado en madera.
Palacio Gyeongbokgun
Este fue el primero de todos los palacios, cuando Seúl fue designada capital de Corea, en el lugar se puede apreciar la cultura de la dinastía Joseon. También se le conoce como Palacio de la Feliz Bendición.
Podrás ver las instalaciones que servían para realizar los asuntos reales y aquellas que servían para recibir invitados importantes, además de aquellos lugares que sirvieron para realizar eventos protocolarios en pabellón para banquetes.
Debes saber que este palacio es una reconstrucción de 1867 ya que el original sufrió un incendio que acabó con todas las instalaciones. Este tipo de incendios fueron provocados en la intervención japonesa.
Curiosamente este lugar es el más visitado por familias, estudiantes y por aquellos curiosos viajeros, no solo es observar la belleza de los templos, se trata de ver la convivencia coreana.
Vale la pena pasar unas horas visitando este lugar ya que cuenta con el museo Folclórico nacional de Corea el cual te recibe con una hermosa y enorme pagoda. En particular el recinto me pareció muy bueno por que te acerca a las tradiciones de la cultura.
Así podrás saber cuales son las costumbres ancestrales, cuando una persona nace y cuándo una persona muere; sus medios de transporte, la vestimenta su alimentación, su música y un sinfín de vitrinas muy interesantes.
Anexo a este museo se ubica el área de los niños la cual es un poco más moderna y lúdica para que ellos puedan aprender de una manera divertida la cultura coreana.
Un poco más adelante podrás visitar lugares muy interesantes como el palacio Sejongno rodeado de jardines y un hermoso lago el cual será un descanso para la vista de todos aquellos que van por un momento a relajarse.
Este lugar parece salir de la historia de una novela cuando ves a todos los visitantes sonreír sin ningún motivo, solo el hecho de estar ahí contemplando el escenario mientras el viento juega con el pelo de las personas.
No pierdas la oportunidad de acercarte a la puerta Gwanghwamun que se ubica en la avenida principal del palacio para que puedas apreciar el cambio de guarda cada hora desde las 10:00 am hasta las 15:00pm
Es momento de hacer una pausa y visitar Insadong-gil un área de boutiques, restaurantes, comercios, tiendas de souvenirs, te va a fascinar ya que nos recuerda a los barrios de arte.
Palacio Changdeokgung
También llamado de la virtud prospera, este palacio se construyó para utilizarlo en caso de emergencia, ya sea por desastres naturales o por guerras.
El lugar esta repleto de jardines y en su conjunto ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
Debes saber que muchos de estos palacios son muy parecidos en su estructura, arquitectura y distribución, quizá los llegues a confundir, pero como en mi caso, trato de recordarlos por los sentimientos que me transmitieron.
En este caso pude imaginarme en la época de los sultanes y el ver a la gente vestida recorriendo los senderos y los jardines, pude trasladarme hasta el momento justo de ver cómo la realeza realizaba un casamiento.
Palacio Changgyeonggung
Este lugar es la “Alegría Floreciente” y se encuentra conectado al palacio anterior (Changdeokgung). Originalmente se ocupó como centro de recreación.
Al contar con varios jardines se convirtió en el primer centro botánico estilo occidental, además de haber contado con un zoológico.
Fue restaurando en los ochentas removiendo las estructuras cuando fue ocupado por los japoneses y se le dio una nueva imagen ya que estaba muy demolido.
Un paseo agradable por los jardines de la realeza es todo un acontecimiento para los ojos, no pierdas oportunidad de sentarte un rato a percibir los aromas de la naturaleza y los sonidos de las aves.
Las puertas coreanas
No te puedes ir sin visitar las puertas coreanas que funcionaron como parte de la fortaleza de la ciudad. Al estar inmersas en Seúl estas puertas pueden ser parte de una glorieta o una plaza principal.
Vale mucho la pena pasar los primeros dos días inmersos en la cultura ancestral coreana visitando los Palacios de Seúl para que después te des vuelo conociendo las costumbres, la naturaleza y la vida moderna de Seúl.
No olvides tomar mucha agua durante el viaje ya que el jet lag te deshidrata y te estará haciendo pasar momentos complicados sobre todo al llegar a Corea; seguro que pronto te acostumbrarás.
Es emocionante siempre descubrir culturas de las que poco sabemos, así que prepárate, acumula tus puntos premier para llegar a Seúl y #NuncaDejesdeViajar.