Parece que cada vez que viajamos a Sonora, nos sorprendemos más de todo lo que se puede hacer. Al ser un estado tan grande y diverso, la oferta turística es interminable; por eso ahora te proponemos 10 cosas que debes hacer en la Ruta del Río Sonora.
Esta ruta nace a partir del cause del Río Sonora el cual corre del norte de Cananea y llega hasta el mar de Cortés, las etnias prehispánicas se establecieron a lo largo del río y poco a poco con el establecimiento de las misiones se fueron formando pueblos encantadores.
Visitando el noroeste de Sonora
La ruta del Río Sonora incluye: pueblitos considerados como Tesoros de Sonora, lugares naturales, viñedos y gastronomía local. Al ser un lugar poco transitado por viajeros, tendrás la oportunidad de disfrutar sin aglomeraciones.
1. Inicia en Hermosillo y date unas Coyotas
La forma ideal es comenzar por la capital del estado de Sonora, ahí podrás pasar una noche y aprovechar para llevarte una dotación de coyotas, un pan tradicional redondo pero con la consistencia de una empanada.
Las coyotas están rellenas de diversos sabores dulces: piloncillo, cajeta, mermelada de piña, nuez, jamoncillo, coco, almendra; se producen de modo artesanal y en horno de leña.
2.Visita el viñedo orgánico Giottonini
Una vez que tomes camino a la ruta del Río, antes de llegar al primer pueblito llamado Ures, debes hacer una parada en este viñedo orgánico, conocer la plantación de la vid y la elaboración de 3 tipos de vinos.
La forma de producción es completamente distinta a través de la biodinámica, un proceso más exigente que pone a prueba a las uvas en condiciones naturales difíciles, pero llenas de nutrientes naturales.
Debes saber que el viñedo Giotonini no utiliza nada ajeno a lo que nos brinda la naturaleza por lo tanto es completamente sustentable y artesanal. Te recomendamos probar el ensamble de dos uvas y si tienes garganta fuerte, pide un caballito de ron artesanal.
3. Tomate Selfies en las fachadas de Ures
Todos los pueblos que visitarás en la ruta son encantadores, ya sabes, callejoncitos, calles empedradas, plaza bien cuidadas y coloridas casitas. Todo esta tan tranquilo que cada pueblo prácticamente es para tu propio disfrute.
Además de visitar la hermosa placita Zaragoza, la capilla a San Miguel Arcángel y el teatro del Actor Jesús Ochoa, Aprovecha el momento para tomar fotografías de las coloridas casas, son el escenario ideal para subir unas buenas selfies a tu Instagram.
4. hospédate en un hotel-museo
En medio de una zona árida vale la pena hacer una parada en Hacienda Labrador, un hotel rodeado de cactus y cardones que anuncian que algo increíble esta por verse.
Se trata de una hacienda antigua rodeada de árboles frutales, un ojo de agua y la tranquilidad del campo. Te puedes hospedar en las habitaciones que fueron las antiguas caballerizas y escuchar de voz de la propietaria, las leyendas del lugar.
Lo más curioso es que todo el hotel y el casco de la hacienda esta adornado con antigüedades que pertenecieron a las familias de la población. Cuenta con un albergue de tortugas terrestres y una colección de metates por toda la finca.
5. Come Gallina Pinta con la Mamá de todos
Pasando el pueblo de Baviacora, el segundo pueblito, enfílate a la comisaría de Mazocahui, ahí se ubica el hotel y restaurante “San Judas Tadeo”.
La comida tradicional de este lugar vale mucho la pena, puedes pedir una deliciosa machaca con huevo, carne enchilada, un bistec ranchero o la tradicional gallina pinta, plato a base de carne de res, frijoles y maíz pozolero (ni pinta ni gallina)
Todo está delicioso, acompáñalo con tortillitas hechas a mano y un delicioso café colado. La dueña de este lugar es Petra conocida como “la Morena”.
Hay una colección de fotografías de todos los traileros que le llaman “Mamá” quienes la buscan no solo para comer, sino también para que les dé la bendición al salir a carretera.
6. Báñate en las aguas de Aconchi
Aconchi es otro coqueto pueblito, famoso por sus aguas termales que brotan del subsuelo. No olvides tu traje de baño porque en el balneario “Agua Caliente” hay varios nacimientos para que te puedas refrescar a gusto bajo la sombra de los árboles y con agua caliente que brota a más de 50ºc.
Los locales acostumbran visitar este lugar para descansar o para aminorar problemas de artritis o de circulación sanguínea, entre otras enfermedades.
Ahí mismo se ubica una linea de aventura a través de unas divertidas tirolesas.
7. Date un atascón gastronómico y duerme tranquilamente
Este Pueblito es una parada obligada porque además de ser muy fotografiable y visitar su iglesia blanca y su quiosco, podrás experimentar su deliciosa comida a través de sus mesones y restaurantes, ideal para pedir una carne enchilada con tortillas de harina.
Hay dos hoteles que vale mucho la pena y que cuentan con sus propios restaurantes, el primero es Posada del Rio Sonora, de estilo mexicano, con una terraza espectacular y frente a la plaza.
El otro hotel es Posada los Arcos de Sonora, de estilo mexicano con alberca, y un horno donde te preparan pizza con queso asadero, deliciosa. Merece especial atención las camas de este hotel, son extraordinarias.
7. Disfruta y respira de la naturaleza
Saliendo de Banamichi, podrás encontrarte de frente con el cause del río, aunque no es de mucha afluencia, es ideal para hacer una parada y disfrutar de agua que corre tranquilamente, mojarte los pies y dejar que las piedritas te hagan masaje en las plantas.
El lugar es ideal para comer unos tacos de paso, y también para convivir con la gente local que aprovecha bajarse el calor entrando a jugar al rio.
En el camino a Arizpe encontrarás un maravilloso mirador conocido como los Pilares de Tetoachi, unas formaciones rocosas que piden a gritos que les tomes fotos para tus redes sociales. Experimenta aquí el silencio ensordecedor de la sierra verde.
9. Haz Check In en Arizpe y conoce la vinícola más grande
Llegando a Arizpe debes tomarte “la foto del recuerdo” por hacer esta ruta en las Letras monumentales. Visita su reloj monumental y su iglesia del siglo pasado, ambos hechos de ladrillo rojo.
De ahí te encaminas a una vinícola espectacular, Cuatro Sierras, para hacer un recorrido por el viñedo más grande de Sonora, escucha el proyecto que incluye a inversionistas y campesinos
Si vas en época de cosecha, has una degustación de bayas para detectar sus sabores intensos o realiza una cata guiada por el mismo enólogo del viñedo. Obvio, no olvides llevarte unas botellas para tu siguiente punto.
10 Viaja al pasado en Cananea
Las construcciones de esta población guardan en sus paredes, techos altos y pisos de madera, una serie de historias que están relacionadas con la minería. De hecho, si observas bien la mayoría de los edificios le dan un toque al viejo oeste.
Visita edificios en donde mas de una persona te contará historias fascinantes de la época de bonanza y una que otra de suspenso. Visita el Museo antes la antigua cárcel, el Palacio Municipal y el Hospital. No olvides visitar la lujosa Mansión Greenne.
Al ser un pueblo minero, compra souvenirs relacionados con los minerales de la región, y no te olvides de comer unos deliciosos burritos de carne asada antes de emprender tu camino de regreso.
Hay tanto qué hacer en la ruta del Río Sonora que ya nos están dando ganas de regresar y descubrir más de los tesoros de Sonora. #NuncaDejesdeViajar
Qué estás esperando para realizar tu próximo viaje a Sonora. Si quieres vivir esta aventura contacta a Turismo Taruk, o llama aquí (662-310 5213).