Quienes visitan Zacatlán, en el estado de Puebla, logran percibir la niebla y el frío; en un instante, las calles se colman de este clima y no es posible ver nada más allá de la punta de tu nariz.
Partiendo desde la Ciudad de México, se debe seguir la carretera 150, con destino a Puebla y, posteriormente, continuar por la carretera 119 con rumbo a Chignahuapan. Así, llegarás a este hermoso destino que le hace honor a su nombre “Zacatlán de las Manzanas”.
La sidra y demás delicias de este Pueblo Mágico
Al ser Zacatlán un pueblo rico en manzanas, los lugareños buscaron una manera de aprovechar la sobreproducción. Ese fue el origen de las sidras y los licores de fruta que se elaboran en la comunidad.
Por ello, es recomendable visitar lugares como la Sidrera de San Rafael, en donde elaboran esta rica bebida desde la década de 1930. Es un sitio excelente para probar diferentes clases de sidras, licores y cocteles.
La manzana de Zacatlán, cuyo sabor un tanto ácido recién cortada se vuelve dulce una vez que termina de madurar, es la materia prima para la elaboración del producto que acredita este lugar.
En el estado son dos las zonas que predominan en el cultivo de este fruto: la región de Huejotzingo y el Pueblo Mágico de Zacatlán. El primero ubicado en el Valle Central de la entidad, y el segundo en la Sierra Norte.
La cosecha de manzanas que se hace aquí llega a la fábrica, se coloca en contenedores y se lava perfectamente.
Después, pasa a su trituración para extraer todo su jugo, el cual se deposita en contenedores donde permanece mínimo un año, periodo en el cual se hacen de dos a tres traspaleos.
Una vez que se cuenta con el jugo, primero las botellas de vidrio pasan al área de lavado, donde se enjuaga con un desinfectante y agua filtrada para después pasar a la máquina que se encargará de llenarlas de sidra rosada o natural de Zacatlán de las Manzanas.
Visita el Museo de la Relojería de Zacatlán de las Manzanas
Después de un rico aperitivo de manzana, no pases por alto un recorrido por los pasillos de este recinto.
Imperdible para quien decide visitar Zacatlán de las Manzanas, es el Museo de Relojería, Alberto Olvera Hernández. Este recinto cultural, si bien maneja un alto costo de entrada, vale la pena para una visita por lo valioso de su exhibición.
En ella se nos comparte la historia de la fabricación de los relojes, desde los de mayores dimensiones, para que se coloquen en espacios públicos, hasta los compactos e individuales.
Éstas y otras atracciones podrás encontrar en Puebla, no te pierdas Zacatlán de las Manzanas, y recuerda ¡#NuncaDejesDeViajar!