Cuando uno está planeando sus vacaciones, siempre se enfoca en el hotel, el lugar y las actividades que vamos a realizar, pero por lo general casi siempre omite la importancia de la o las personas que estarán en ese viaje, ¿te has puesto a pensar en la compañía de mamá?
Aún cuándo se viaje sólo tratando de cumplir con nuestras metas o expectativas personales. Recuerdo que la primera vez que conocí el mar, fue el magnífico Océano Pacífico en el memorable puerto de Acapulco.
Al ver la distancia de este monstruo incalculable, cualquiera se pone a pensar en la fragilidad del ser humano. Recuerdo muy bien que la compañía de mamá fue más magnífica que cualquier otra.
Viaje en compañía de mamá a Acapulco ¡Experiencia única!
Lo mejor de viajar en compañía de mamá es que viajas con alguien que en realidad conoces y te conoce, no puedes tener filtros cómo con tus amigos o pareja.
Es una de las mejores experiencias que cualquiera con un familiar cercano puede tener. El hotel en el que nos hospedamos era el Real Bananas, un hotel bastante divertidísimo para mis recuerdos.
Así mismo, cuenta con 2 albercas, restaurantes y tiene pie de playa que realza todos los atractivos que pueden manejar las playas.
Tuvimos las mejores oportunidades para poder conocer el famoso Puerto de Acapulco juntas con su deliciosa comida marítima.
Nos lanzamos a conocer el parque acuático Cici , que aunque teníamos acceso a la playa, deseábamos conocer este parque bastante popular ente los acapulqueños.
Conocimos también el Parque Papagayo, de igual fama popular para las personas de Guerrero así como de otros estados. Recuerdo que comimos ricos camarones y en un restaurante de la calzada en la que estábamos caminando.
El salto de la quebrada con esos clavadistas natos de la región, te sacan un suspiro si es tu primera vez observándolos y puedes disfrutar de una rica nieve mientras ves el espectáculo de gran valor.
Recuerdo que dentro del hotel había un gran tobogán que me daba miedo, mi mamá me comentó que debería de aprovechar la oportunidad de echarme por el tobogán ya que al regreso a la Ciudad de México me arrepentiría por no hacerlo.
Ignoré este consejo y pasó, llegamos a la ciudad y me arrepentí de no hacerlo, dejando en claro una enseñanza para toda la vida, hacer caso a los consejos de mamá.
El mismo Acapulco, diferente compañía
Tiempo después regresé en un par de ocasiones a Acapulco, con amigos y otro tipo de compañías. Pero la mejor experiencia y recuerdos que tengo de este maravilloso puerto con sus magníficas playas y atracciones, es el viaje tan espectacular que realicé con mi mamá.
Porque en realidad es un viaje único, viajas con alguien que te conoce aunque lo reniegues, con alguien que le puedes hacer desplantes groseros y aún está ahí, para cuidarte de las quemaduras del sol.
Si estás planeando unas vacaciones idóneas, échale un ojo a Acapulco y atracciones que te dejarán con el ojo cuadrado y no sólo eso, la calidez de sus pobladores es algo especial.
¡Y si lo que deseas es que ese viaje sea especial, la primera persona en la que debes pensar es en la compañía de mamá!
Por cierto, el mejor recuerdo de este viaje en compañía de mi mamá a Acapulco, bastante grata, y al ser una de las primeras ocasiones que conocí el mar.
Me llevo este momento en los mejores recuerdos de mi infancia y mi vida. Acapulco es uno de los mejores destinos que te pueden a ayudar a reconectarte contigo. Y recuerda, ¡Nunca dejes de viajar!