Fiesta multicolor, música y un pueblo unido en la celebración de la Guelaguetza Fiesta de Ofrenda. Una conmemoración de folclor, gastronomía y turismo que reúne a viajeros nacionales y extranjeros. Pero sobre todo une a las diferentes etnias del estado de Oaxaca.
Este evento es uno de los más representativos de la entidad y de México en general. El Souvenir te invita este mes de julio a descubrir y disfrutar los “Lunes de cerro” en esta bella ciudad.
Desde inicios de mes los oaxaqueños empiezan con actividades donde demuestran el talento de su cocina. Y el arte de su cultura a través de las muestras y los eventos que se organizan a lo largo de la ciudad.
Este año ya ha empezado el Festival del Mezcal que año con año es la antesala de esta magna celebración.
Se puede degustar mezcales blanco, de pechuga, añejo o esos deliciosos brebajes llamados cremas de mezcal. Las hay de diferentes sabores: nanche, coco, café, chocolate o piña. Te recomendamos el de nanche por ser un fruto que se respeta y consume mucho en este estado.
A partir de la primera semana de Julio se exhibirán en el Museo del Palacio. Una muestra de trajes típicos de las ocho regiones del estado que participan en la fiesta.
Arreglos de flores de los valles centrales en la Guelaguetza
Estarán presentes en diversos puntos como jardines, parques y alamedas; mujeres con sus cestos de flores sobre la cabeza o el hombro inundarán de fiesta y tradición las avenidas principales.
También en el Museo Palacio habrá una grandiosa exposición que captura en fotografías las escenas más importantes de la Guelaguetza en sus últimas ediciones.
Fernando Franco es el responsable de estas imágenes que representan perfectamente esta tradición zapoteca; colores, movimientos y sonrisas son atrapados con su lente como si reviviera esos momentos.
Por supuesto la gastronomía no debe faltar siendo Oaxaca un enorme representante del arte culinario. A la mitad del mes empieza el Festival de los Moles.
Donde se presentarán más de 20 preparaciones entre los que obviamente destacan el mole oaxaqueño, el coloradito y el amarillo.
Se contará con la presencia de especialistas quienes darán conferencias respecto al tema y la tan esperada degustación de todos estos platillos exquisitos.
Al mismo tiempo de esta actividad también se estarán realizando fiestas en honor al téjate y los tamales, bebida y plato característico de Oaxaca.
El quesillo y el queso Oaxaca igualmente tendrán un espacio en tierras zapotecas. Su singular sabor cautiva a muchos ya que la versatilidad del uso que se le puede dar es sinónimo de buenas preparaciones.
¡Hacer estos recorridos culinarios, es una verdadera delicia!
La fiesta grande empieza desde el 19 de Julio cuando cientos de personas de diferentes municipios desfilan por las calles de la ciudad, trayendo consigo la música oaxaqueña y la viva pasión que caracteriza a cada una de sus tierras.
La belleza de sus mujeres y la variedad de los colores en la diversidad de su vestimenta, la calidez humana se contagia y se brinda una comunión entre pueblos.
El centro histórico se envuelve en un ambiente de júbilo y cultura, las luces que iluminan las calles y las iglesias forman escenarios perfectos para admirar a una ciudad paralizada por los festejos.
Las funciones de La Guelaguetza como tal son los lunes 21 y 28 de Julio, en dos funciones por día, así que prepárate para contagiarte de risas, cantos y emociones que sólo puedes vivir en un lugar como este.
Los sones, las chilenas y las coplas resuenan en el Cerro del Fortín.
Las danzas más representativas de cada región se hacen presentes en un encuentro de orgullo en donde la vestimenta brilla al ser portada por las chinas, los bailarines y las tehuanas en este gran teatro al aire libre.
Las frutas vuelan por los aires, así como el pan, los dulces y por supuesto las artesanías, vuelan porque son la ofrenda que esos pueblos regalan a su público (de ahí el termino Guelaguetza, dar y recibir).
La banda en vivo estremece cada uno de los rincones de la Guelaguetza
Y las tradiciones arraigadas de nuestros antepasados prehispánicos siguen estando presentes en cada palabra, en cada baile.
Y por supuesto en cada persona que es testigo de esta tradición que se va compartiendo entre generaciones.
Actividades hay muchas por hacer, como la representación de la leyenda de la diosa Donají, un espectáculo visual impresionante que se realiza en el mismo teatro pero en horario nocturno.
¿Qué te parece comprar unas artesanías de cada una de las ocho regiones del estado? Recuerda que los textiles y bordados son realizados con paciencia y detalle, así como la joyería de filigrana, un souvenir que le va bien a todas las mujeres.
Si lo prefieres puedes estar presente en el Certamen Diosa Centéotl acompañado de una nieve de leche quemada con tuna.
Al asistir, tú también haces Guelaguetza ya que de alguna manera recibes todo el folclor y lo compartes con tus amigos y familiares convirtiéndote entonces, en un promotor de la cultura viva y de una bella costumbre. ¡Hagamos esta ofrenda, hagamos Guelaguetza!
Aquí un video de la tradición:
Y recuerda #NuncaDejesDeViajar