Viajar en avión a largas distancias es una pesadilla para cualquier viajero, y más si estás viajando a un lugar internacional con un horario distinto. Lo que puede empezar como un viaje emocionante y lleno de ilusiones, se puede volver algo agotador y fastidioso, haciendo que los primeros días sean menos agradables.
Es de ahí de donde surge el famoso y temible desfase de horario —mejor conocido como Jet Lag— que ocurre cuando se viaja de una zona horaria a otra. Puede ser más notorio cuando existe una diferencia de dos o tres franjas horarias, que puede llegar a afectarte durante dos a seis días.
¿Qué OCASIONA el JET LAG?
Prácticamente, el Jet Lag lo que hace es que tu reloj interno o ritmo circadiano no coincida con tu horario local normal: tu cuerpo sigue con la creencia de su rutina habitual, pero en un horario completamente distinto. Esta diferencia puede llegar a ocasionar fatiga, problemas para dormir, poca concentración e incluso problemas estomacales.
Un síntoma que suele ser más intenso al viajar hacia el este (Asia, Europa, África y parte de Oceanía) que al oeste, puesto que se requiere acortar el ciclo natural de sueño en lugar de alargarlo. Y es que el reloj interno, en la mayoría de las personas, funciona por casi 24 horas. Viajar hacia el este puede provocar gran cansancio, a pesar de haber dormido en el avión.
¿TODOS pueden sufrir de JET LAG?
Prácticamente sí; todos podemos sufrir de Jet Lag, aunque es importante mencionar que cada persona puede responder de una manera muy distinta a otra. Esto se debe a la resistencia que cada persona puede tener en cuanto a la privación de sueño; además, factores como la sensibilidad, tipo e intensidad de la luz a la que estés expuesto, así como variaciones en los relojes, también juegan un papel importante.
A esto se le pueden agregar los periodos largos sentado, cambios en la atmósfera, deshidratación y humedad del vuelo. Muchos pueden ser más sensibles a estos factores y por ende, ser más predecibles al Jet Lag.
¿Cómo EVITAR el DESFASE de HORARIO?
Evitar el desfase de horario en un viaje hacia un destino con zona horaria distinta suele ser imposible. Pero existen algunos consejos que pueden ayudar a amortiguar los síntomas, o incluso eliminarlos por completo. Así que aquí te dejamos algunos tips que puedes poner en práctica para reducir la probabilidad de sufrir Jet Lag.
Ajustar su HORARIO DE SUEÑO con antelación
Una tarea que puede empezarse incluso con una semana de antelación del vuelo es ir reduciendo la diferencia horaria entre la zona horaria que dejas atrás para estar sincronizado a la que estás por llegar. De esta forma irás adaptando tu rutina diaria al destino que estás por visitar, acostumbrando tu ritmo circadiano con la zona horaria. Eso sí, suele ser complicado si es que tienes cosas que hacer por el día.
Aumentar tu EXPOSICIÓN a la LUZ NATURAL
Una actividad fundamental que te ayudará a la regulación en el horario de sueño es la liberación de melatonina, una hormona que regula el ciclo de sueño en el cuerpo, y la mejor manera de lograrlo es aprovechar la luz solar. Pasar un rato en el sol puede ayudar a mejorar tu adaptación a una nueva zona horaria. Como recordatorio, disfrutar de la luz matutina puede ayudar si te diriges al este. La luz del atardecer servirá más si viajas al oeste.
Descansar muy BIEN y MUCHO
Descansar en perfectas condiciones antes de tu viaje será crucial para evitar este síntoma. Como bien se sabe, la falta de sueño es el principal síntoma del Jet Lag. Así que aprovecha cualquier momento para poder dormir… El bus, el tren, el avión o incluso los aeropuertos. Solo recuerda poner una alarma; no se te vaya a olvidar abordar.
Bebe MUCHA AGUA antes y durante TU VUELO
El volar a grandes altitudes por un período realmente largo puede causar deshidratación, algo que el aire seco provoca muy a menudo. Se recomienda evitar a toda costa las bebidas alcohólicas, así como la cafeína, que también puede afectar tu adaptación al horario de sueño. ¿Lo mejor? Una refrescante botella de agua o un suero.
Planifica tu VUELO SABIAMENTE
Elegir un vuelo en el que decidas llegar al final del día o al anochecer puede ser crucial para el horario de sueño. Dependiendo de tu destino, puede ser útil programar un vuelo con llegada a última hora de la tarde (aproximadamente a las 07:00 p.m.) para que así puedas dormir por la noche, en lugar de tomar la famosa siesta al mediodía después de aterrizar.
Viajando por un BIEN MAYOR
Cuando hablamos de viajar, sabemos que no todo puede ser perfecto. Tenemos que aceptar las buenas y malas experiencias como un todo, y el Jet Lag es parte de ello. Así que no tengas miedo, que es mejor decir que tienes falta de sueño por viajar a decir que fue por una noche de trabajo… ❖
#NuncaDejesDeViajar