Para empezar con un poco de contexto, tenemos que decirte que Camboya es un país perteneciente al continente asiático; se encuentra justo debajo de Tailandia y Vietnam. Y si bien, es un destino con una increíble belleza y muchísimo que explorar, desafortunadamente, enfrenta una difícil realidad… vestigios de conflictos pasados.
Y es que, gracias a la Guerra de Vietnam, se estima que en Camboya aún hay aproximadamente de 2 a 4 millones de minas terrestres que aún siguen enterradas en el subsuelo. Las comunidades enteras se encuentran en constante peligro, y su limpieza ha durado más de 10 años… Y es ahí cuando entran en acción las HeroRATs, las gigantes ratas heroínas.
Tan PEQUEÑAS como EFECTIVAS
Normalmente, cuando hablamos de héroes que salvan vidas, nos imaginamos a bomberos, médicos e inclusive perros de rescate; sin embargo, en esta ocasión hablamos de roedores, sí, así como leíste. Estas pequeñas peludas son conocidas como “ratas gigantes africanas” o “HeroRATs”, provenientes de Tanzania, un país de África Oriental. Cuentan con un olfato superdesarrollado que es entrenado para detectar minas terrestres y explosivos sin detonar.
Las ratas gigantes, aunque te parezca difícil de creer, son parte de la ONG APOPO, una organización fundada en 1995 que se encarga de salvar vidas entrenando a las ratas para poder olfatear y detectar con éxito y precisión el peligro de las minas terrestres. Pueden rastrear minas sobre 668 metros cuadrados (lo mismo de una cancha de tenis), tardando solo 20 minutos… algo que le costaría hasta 4 días a un ser humano con una rastreador de metales.
La ventaja de las HeroRATs es que, aunque para su especie son grandes y pesadas, en realidad siguen siendo pequeñas… lo suficiente para poder explorar lugares en los que los humanos no cabrían, además de que su ligero peso (de entre 1 a 1.5 kilos) no activa las minas cuando caminan sobre ellas. Básicamente, podríamos considerarlas algo así como unas mini espías.
¿Cómo son ENTRANADAS las HeroRATs?
El entrenamiento de las HeroRATs dura aproximadamente 9 meses, y empieza a partir de que tienen 4 semanas de nacidas. Su entrenamiento es de media hora al día, de lunes a viernes. Pero antes de eso tienen que socializar con humanos para que se acostumbren a ellos y a su nuevo entorno de trabajo.
Una vez acostumbradas, se les enseña a asociar el olor de los explosivos con una recompensa deliciosa, como plátano o crema de cacahuate, uno de los favoritos entre las HeroRATs. A este proceso de asociación y recompensa se le llama “refuerzo positivo”, por lo que para estas heroínas, el identificar correctamente el explosivo las motiva para así recibir su recompensa.
Conforme avanza su entrenamiento, son enfrentadas a simulaciones en terrenos similares a los campos minados, para así enseñarlas a escabullirse y olfatear por la tierra. Finalmente, tienen que realizar una evaluación final: el test de la “International Mine Action Standards”, para así poder recibir su acreditación oficial como HeroRATs. Además de todo, algunas ratas están entrenadas para inclusive detectar la tuberculosis a través del esputo (materia expulsada al toser), salvando cientos de vidas más. Las ratas que no logren pasar el examen, son transferidas a otro proyecto, o jubiladas anticipadamente, algo que es sumamente raro que pase.
El costo para poder entrenar una rata, es de 12 € euros al mes... más o menos $262 pesos mexicanos, esto considerando sus cuidados, protección y alimento. Sin embargo, el entramiento completo cuesta 900 €, más de $19,000 pesos mexicanos.
HeroRATs y los bigotes condecorados
Aunque tal vez no lo creas, la labor de las HeroRATs ha ayudado a despejar de minas millones de metros cuadrados de terreno en mucho menos tiempo de lo que lo haría un ser humano. Esto ha devuelto la seguridad a comunidades enteras, por lo que muchas son condecoradas como si fueran soldados veteranos.
Un claro ejemplo de esto es Magawa, una HeroRAT entrenada por APOPO que se convirtió en toda una heroína al detectar cientos de minas terrestres en Camboya, logrando limpiar más de 225 mil metros cuadrados de terreno.
Inclusive, la honorable rata logró romper un Récord Guinness por detectar más de 71 minas terrestres y 38 artefactos explosivos sin estallar. Magawa trabajó arduamente, salvando vidas durante 5 años, por lo que en 2021 se jubiló siendo condecorada por su valentía y esfuerzo. Tristemente, falleció en enero del 2022.
¿Dónde CONOCER a las HeroRATs?
Si después de conocer un poco más sobre estas increíbles ratas, tienes ganas de darles un muy merecido aplauso, puedes visitarlas a través de un tour por el Centro de Visitantes de APOPO, ubicado en Siem Reap, Camboya.
Aquí podrás realizar un recorrido donde aprenderás sobre su proceso de entrenamiento, habrá una sesión de preguntas con un guía angloparlante e incluso una demostración de trabajo de las HeroRATs.
También podrás descubrir una pequeña exposición sobre el conflicto de Camboya, y podrás ver un video sobre la historia de APOPO y las HeroRATs, mientras disfrutas de una refrescante bebida.
Y solo para terminar, podrás darte una vuelta a la tienda de souvenirs de APOPO, donde podrás encontrar playeras, gorras, termos y más cosas relacionadas con las HeroRATs. No olvides que, si tienes la oportunidad, puedes realizar una donación para poder ayudar a APOPO a continuar con esta importante causa. Incluso, a veces existe la oportunidad de adoptar a una HeroRAT retirada, donde a partir de una donación mensual, podrás darle una vida digna.
Es importante mencionar que un tour por APOPO dura aproximadamente una hora, y abren todos los días de 08:00 a.m. a 05:00 p.m. El costo aproximado es de 10 € por persona ($220 pesos mexicanos).
Tal vez ahora, la próxima vez que veas una rata, antes de hacer muecas, recordarás que en algún lugar recóndito del mundo, una prima lejana suya está salvando vidas con su superolfato e inteligencia. ¿Habrías creído que un roedor podía ser tan admirable? ❖
#NuncaDejesDeViajar