Cómo explicar las dunas del Sabanal en veracruz… ¿Has sentido la brisa marina en tu rostro mientras vas a una velocidad que nadie te puede parar?
Pisar el acelerador hasta el fondo sin estar pensando en que alguna una patrulla te vaya a detener, ya es sentirse liberado. Así que déjate enganchar por las dunas del Sabanal en Veracruz y siente la adrenalina al cien.
¿Dónde disfrutar de las dunas?
Chachalacas, una hermosa playa de arena morena que tiene las dunas más cercanas a la Ciudad de México. Experimentar divertidos paseos en vehículos 4×4 o practicar sandboard en el desierto del Golfo de México.
Y es que recorrer las dunas en un buggie diseñado para darte unos buenos revolcones, es muy liberador.
La recomendación es que vayas con un grupo de amigos que les encante la aventura y pasen una tarde echando carreritas, para que después de una buena asoleada y empolvada, se diviertan mojándose en las olas marinas.
El Sabanal es una extensión de 550 hectáreas de terrenos arenosos que simulan un amplio desierto, además de resultar divertido podrás disfrutar de un escenario fuera de serie.
¿Qué tantas actividades hay en las Dunas del Sabanal?
Colinas inmensas en forma de una enorme alfombra plegada esperan ser conquistadas por los más atrevidos.
En el lugar existen algunos prestadores de servicios turísticos encargados de rentar las cuatrimotos para explorar un desierto de película.
Las dunas son depósitos de arena que fueron creadas de manera natural por la fuerza del viento, para que estas se formen, debe haber un cuerpo de agua cercano como el mar o algún lago.
Recorrer las dunas caminando también es toda una experiencia, lo recomendable es estar en la cima para luego descender. En algún momento sentirás que estás en el desierto del Sahara o el inundado de Brasil.
Pero si lo tuyo es hacer sandboard, te recomendamos llevar tu tabla y lanzarte una y otra vez. También podrás experimentar otras actividades como pasear a caballo por el desierto o lanzarte de un parapente.
Después de un largo y asoleado día lo recomendable es lanzarse al agua, las playas son de un oleaje tranquilo y además podrás realizar otros deportes acuáticos como esquí, surf o incluso buceo.
No todo es extremo.
Si deseas continuar disfrutando de la naturaleza, puedes hacer un recorrido por el río Actopan, el cual desemboca en el Golfo de México.
También, se encuentran las zonas arqueológicas de La Antigua, Zempoala y Quiahuiztlán.
La vegetación de selva mediana y baja, así como los manglares, son el hogar de una gran variedad de fauna local y migratoria.
Para llegar a Chachalacas y al Sabanal debes trasladarte al municipio Úrsulo Galván, ubicado a 79 km de la capital del estado; ya estando ahí, las dunas se encuentran a solo cinco minutitos.
Recuerda, #NuncaDejesDeViajar