El símbolo más famoso de la Ciudad de México es el Monumento a la Independencia y se ubica en Paseo de la Reforma, prácticamente al centro de la glorieta principal.
¿Quién no conoce este hermoso monumento que nos recuerda que México es un país libre e independiente?
Todos hemos asistido al Angel para celebrar algo, le hemos tomado alguna foto cuando paseamos y es imperdible para cualquier nacional y extranjero cuando visitan la CDMX.
Curiosidades del Ángel de la Independencia que debes saber antes de visitarlo:
La primera piedra se puso un 2 de enero de 1902 (hace 115 años) en una ceremonia encabezada por el Gral. Porfirio Diaz, quien colocó en su interior un cofre dorado con el acta y unas monedas de la época.
La obra del arquitecto Antonio Rivas Mercado, del ingeniero Roberto Gayol y del artista italiano Enrique Alciati, comenzó a inclinarse por la mala cimentación.
Fueron las 2400 rocas que pesaron de más que lamentablemente provocó que la estructura se inclinara.
Después de demoler lo que ya se había avanzado, se rediseñó una nueva columna por los ingenieros Gonzalo Garita y Manuel Gorozpe.
Una nueva cimentación formada por un tupido entramado de 5 mil pilotes de madera y algunos de concreto, fueron hincados a 25 metros de profundidad mediante un martinete de vapor que los enterraba con un émbolo de una tonelada de peso.
¿A quiénes venera el Ángel de la Independencia? (Significado estructural)
Esto seguramente ya lo sabias; el monumento fue inaugurado por Porfirio Díaz el 16 de septiembre de 1910, con motivo del Centenario de la Independencia de México.
Si lo has notado, en el basamento hay 4 esculturas que representan la Ley, Justicia, Guerra y Paz. Y en la placa de mármol, al frente, se lee: “La Nación a los Héroes de la Independencia”.
Por otro lado, delante de la inscripción hay un león conducido por un niño que simbolizan “fuerza en la guerra y docilidad en la paz”.
En su base hay estatuas en mármol de Carrara, de los principales héroes de la Independencia: Miguel Hidalgo y Costilla, José María Morelos y Pavón, Vicente Guerrero, Francisco Javier Mina y Nicolás Bravo.
Dos esculturas femeninas acompañan a Hidalgo, la Historia a la derecha y la Patria a su izquierda, ofreciéndole un laurel.
Hay 24 nombres inscritos en la base del monumento y se encuentran grabados en las caras de los pedestales de las 4 estatuas.
Se trata de personajes que han aportado al país su obra, su coraje y su patriotismo, algunos de ellos: Melchor de Talamantes, Miguel Barragán, Andrés Quintana Roo, Leonardo Bravo, José María Liceaga y Epigmenio González, entre muchos otros.
Pocos saben de la estatua al interior del mausoleo. Pertenece al irlandés Guillén de Lampart, llegado a México en 1640, quien enloqueció y se autonombró Rey de México. Su osadía le costó la vida.
Una hija del Arq. Antonio Rivas Mercado, posó para adornar el medallón central que aparece en una de las puertas de entrada al mausoleo. Su rostro simboliza a la República Mexicana.
La Columna mide 36 metros de altura y 45 si se incluye el ángel. Está decorada con palmas, guirnaldas y dos anillos.
Anillos que llevan los nombres de 8 héroes de la Independencia: Agustín de Iturbide, Juan Aldama, Ignacio Allende, López Rayón, Hermenegildo Galeana, Mariano Matamoros, Guadalupe Victoria y Manuel Mier y Terán.
Entre daños y restauraciones.
La Columna de la Independencia se ha restaurado y reconstruido en varias ocasiones. La más importante fue en 1958, cuando el sismo de 7.9° del 28 de julio de 1957, derrumbó el ángel y este cayó al suelo.
En el año 2006 se aplicó a la superficie del ángel una nueva chapa de oro de 24 kilates. ¿No luce increíble?
El Ángel de la Independencia representa la Victoria Alada, es de bronce con recubrimiento de oro, mide 6.7 metros de altura y pesa 7 toneladas.
En una mano sostiene la corona de laurel, símbolo de la victoria, y en la otra una cadena con eslabones rotos, símbolo del final de la esclavitud impuesta durante 3 siglos de dominio español.
A diferencia de lo que muchos creen, no fue donada por ningún gobierno extranjero, se construyó con recursos propios y Alciati hizo el vaciado en bronce a la “cera perdida” en los Talleres Galli.
En su interior existió una escalinata de piedra en forma de caracol que constaba de 159 escalones y que conducía al mirador que queda debajo de la base del Ángel de la Independencial.
Esta escalinata se eliminó en 1957, al reforzar la estructura de la columna y fue substituida por una escalera metálica que tiene cerca de 200 escalones.
Conoce su interior y captura el momento desde lo más alto
Hay una forma de subir a lo más alto que se puede del monumento, contemplar la avenida Reforma y tomarte una selfie con el Ángel de la Independencia, es gratis, únicamente tienes que realizar algunos sencillos trámites.
Se trata de una visita guiada por conducto de la Secretaria de Cultura del Gobierno del la CDMX.
Los recorridos guiados son todos los días, están a cargo de historiadores de la delegación Cuauhtémoc, este recorrido te permite conocer la historia del monumento, visitar el mausoleo que contiene los restos de personajes de la historia de la Independencia y subir al mirador.
La actividad gratuita es de lunes a viernes, sin embargo necesitas tramitar el permiso en la delegación, antes de ir realiza una llamada telefónica al número 2452-3100, al departamento de Patrimonio Cultural.
Primero debes hacer un escrito explicando el motivo de tu visita, presentarlo personalmente en el segundo piso de la delegación, de lunes a viernes de 10:00 a 15:00 horas.
Después debes presentarte la misma semana del día en que deseas subir al Ángel de la Independencia con una identificación con fotografía.
Además podrás llevar a mínimo 6 personas. Las visitas al Ángel son de lunes a domingo de 10:00 a 16:30 horas.
Ahora ya sabes las curiosidades del Ángel de la Independencia, si quieres conocer el monumento mas importante de México este es el momento; si eres visitante y no lo conoces entonces no has venido a la CDMX. #NuncaDejesDeViajar