¿Qué te parece si después de una semana llena de actividades en el trabajo te despiertas un sábado con un clima maravilloso y enciendes tu auto con el objetivo de relajarte con las manifestaciones culturales de civilizaciones antiguas? Es por esto que te invitamos a conocer la zona arqueológica de Xochicalco en el Estado de Morelos.
Xochicalco “Lugar de la casa de flores”
Si vives en la Ciudad de México no tienes que ir muy lejos, basta con que conduzcas dos horas para que descubras Xochicalco, una zona arqueológica en el estado de Morelos localizada entre Temixco y Miacatlán.
“Lugar de la casa de flores” ¡y vaya que el nombre le queda bien! en época de lluvias toda la vegetación reverdece desplegando todo un abanico de colores.
En su plaza central cuenta con la emblemática pirámide de la Serpiente Emplumada que en aquella época tenía un valor y un gran significado debido a los cultos y sacrificios que se realizaban en honor a sus dioses y a la bondad de la tierra, la lluvia y el viento.
Fue también centro ceremonial, y testimonio de ello es el uso del famoso “Temazcal”.
Esta antigua ciudad se distingue por sus hermosos diseños con relieves de roca y sus basamentos de formas prehispánicas.
Xochicalco también es reconocida por la arquitectura que en ese entonces influyó en la construcción de cuartos cerrados con piedra y adobe; sus templos con múltiples entradas fueron cubiertos con estuco, material hecho a base de cal, arena y agua.
Conviértete en un jugador del juego de pelota
Seguramente muchas veces has escuchado hablar del juego de pelota, pero ¿Cuántas veces has estado en un campo donde puedas sentir sus dimensiones?.
En Xochicalco podrás acercarte al punto de sentir que eres un jugador, sólo debes tener un poco de cuidado porque ¡recuerda que a los ganadores del juego se les sacrificaba! y esto era un honor.
Puedes ser testigo de un observatorio subterráneo, procura ver el detalle de la luz del sol entrando por la cavidad superior y justo cuando estés debajo del orificio, imagina el cielo estrellado que los xochicalcas podían ver.
Lo recomendable es caminar un poco a lo largo de la zona arqueológica, desvíate en senderos y veredas para que puedas descubrir la vegetación.
Llega al museo y sé testigo del talento que los habitantes tenían con las manos para realizar tallados en piedra.
Ellos también eran muy buenos para elaborar vasijas e instrumentos que se manejaban para la preparación de los rituales y de sus alimentos.
Espectáculos en la zona arqueológica
Después de una jornada de descubrimiento arqueológico, visita los locales que ofrecen ricos pambazos y sopes de sesos y queso o si lo prefieres no dejes de probar los sopes de cuitlacoche -hongo comestible del maíz- con papas que son ¡una delicia!, refréscate con las aguas de sabores naturales que venden al salir del lugar.
Te recomendamos volver más tarde para que puedas ver el asombroso atardecer y llenes tus pulmones de aire limpio.
Al anochecer, Xochicalco se vuelve otro, sus edificios se cubren de luces de colores proyectadas al ritmo de música y un cielo completamente estrellado que brinda un aura mística que asombrará a propios y extraños.
Espectáculo ideal para que puedas tomar varías fotografías y recuerdes los contrastes que conjugan pasado y modernidad.
Los imperdibles del lugar
Al otro día dirígete a la presa “El Rodeo”, un lugar en el que puedes practicar pesca y comer deliciosos mariscos que son preparados por los mismos pobladores de Miacatlán.
Cercano a la presa se encuentra “la Laguna de Coatetelco”, pacífica zona con aguas azules y sonidos de la naturaleza que te envolverán en su tranquilidad.
En este espacio puedes cabalgar a caballo o darte un chapuzón que te refrescará del intenso calor de Morelos.
En las cercanías del pueblo está la Parroquia de San Juan Bautista, visita esta impresionante iglesia pintada de blanco que sobresale por su enorme cúpula, y su maravillosa vista que te sorprende e incita a abrir cada vez más los ojos.
Kilómetros cerca de la Laguna encontrarás otra zona arqueológica llamada Coatetelco o “Lugar de los Montículos de Serpientes” territorio discreto donde se veneraba al dios del viento.
Xochicalco, Patrimonio Mundial por la UNESCO
Por su legado e importancia prehispánica no te sorprenderá saber que Xochicalco fue declarada Zona protegida por el Gobierno Federal mexicano y Patrimonio Mundial por la UNESCO.
Todo esto gracias a su belleza y porque fue uno de los asentamientos más importantes después de la caída de la gran Tenochtitlán. Su crecimiento duró casi 250 años y floreció como civilización y como sitio de culto al dios Tláloc.
Sé testigo de una extraordinaria zona arqueológica y cuando estés ahí sabrás que existió una civilización imponente que dio origen a lo que actualmente llamamos “México”.
Para conocer esta y más zonas arqueológicas #Nuncadejesdeviajar.