¿Será cierto que si excavamos y excavamos, vamos a llegar hasta China, así como pasa en las caricaturas? Podría ser cierto, pero hay una manera mucho más fácil: Llegar en avión con el nuevo vuelo Shenzhen-CDMX, operada por China Southern Airlines.
México y China tienen algunos tipos de atractivos en común: culturas milenarias, edificaciones majestuosas y una deliciosa gastronomía. Con este vuelo, que tendrá dos frecuencias semanales y una distancia de más de 14 mil kilómetros, podremos conocer todo lo que la cultura oriental tiene para nosotros.
¿Qué ver si vienes de China en el vuelo Shenzhen-CDMX?
Si eres un viajero de China, después de un épico vuelo Shenzhen-CDMX, llegarás a la mera metrópolis de México. Sin duda te van a encantar los coloridos mercados llenos de frutas, verduras y riquísima comida; los museos son otro imperdible, siendo nuestra ciudad la que más recintos culturales tiene en el mundo; quedarás boquiabierto ante las majestuosas pirámides de Teotihuacán y, ¡ah! los tacos al pastor son una parada obligatoria.
Y eso es solo el comienzo. Si ya viniste desde lejos, ¿por qué no te animas a explorar la península de Yucatán? Ahí, se erigen las milenarias ruinas mayas de Chichén Itzá, y los cenotes de aguas transparentes hacen señas para un baño revitalizante. Y si lo que buscas es paz, las playas de Tulum les esperan con su arena como azúcar y un mar de azul ensueño.
Mexicanos al Oriente
Para los mexicanos que toman el vuelo Shenzhen-CDMX, la ciudad los espera con su skyline futurista y su espíritu innovador. Es la puerta de entrada a China, un país de contrastes donde la tradición milenaria se encuentra con la vanguardia tecnológica.
Vuelo Shenzhen-CDMX: Un festín de culturas
El nuevo vuelo Shenzhen-CDMX de China Southern Airlines es tu pasaporte a un festín de culturas. Con dos vuelos a la semana, esta conexión va más allá de ser un canal para negocios y escapadas, pues te espera un tapiz de vivencias y anécdotas entre dos tierras llenas de vida.
Sube al Airbus A350 y vuela directo durante 16 horas desde Shenzhen, o si prefieres un pequeño break, haz una parada en Tijuana y estira las piernas antes de completar las 21 horas y 20 minutos de regreso. ¡Este puente aéreo es la promesa de un México y China más unidos que nunca!
#NuncaDejesDeViajar