Los viajes de incentivos siempre son bien recibidos

Una empresa exitosa no es aquella que obtiene las mejores ventas ni la que lanza al mercado el mejor producto. Una empresa exitosa es aquella que se preocupa por satisfacer las expectativas y necesidades de todos los involucrados. Por eso hoy te decimos qué es un viaje de incentivo.

La importancia de los trabajadores y los viajes de incentivos

Desafortunadamente, en las pequeñas y medianas empresas son los empleados la menor preocupación de los directores.

En contraste, la mayoría de las grandes empresas saben la importancia del capital humano y procuran su bienestar.

Los viajes de incentivo son una excelente forma de expresar esa preocupación por mantener un indispensable equilibrio entre los trabajadores y la empresa ¿Pero qué es un viaje de incentivos?

Un viaje de incentivos es un premio que la compañía crea y planifica para la motivación de sus trabajadores. La cual puede estar dirigida a obtener cierto resultado o de dar a conocer nuevos productos y servicios.

A diferencia de otros premios, los viajes tienen un cierto sentido de ilusión alimentando los deseos de las personas que los reciben.

Ventajas de tener colaboradores contentos

Cada día son más las organizaciones que se dan cuenta de la importancia de tener a un empleado contento y de hacerle saber cómo la actitud repercute en su trabajo.

Aunque a primera vista el retorno de la inversión no puede estar muy claro, a la larga las ventajas son muchas, provocan una mejor comunicación, estimulan a departamentos que tengan un índice de productividad bajo, fomenta el trabajo en equipo y evocan memorias.

Para planear un viaje de incentivos, el primer paso es determinar el objetivo: hacia a donde y a quienes está dirigido, una vez delimitado este rango, el siguiente paso es elegir el tipo de viaje que realizaremos.

Éste dependerá del presupuesto que tengamos preestablecido, desgraciadamente es aquí en donde encontramos el principal problema, muchas compañías no tienen suficientes fondos para realizarlos.

Pero todo esto dependerá del ingenio de las personas encargadas para buscar alternativas. Existen muchas actividades o lugares que no representan un gran desembolso.

Este tipo de viajes deben estar divididos entre la parte lúdica o de esparcimiento y la profesional en la que se incluirán charlas, convenciones, mesas de trabajo o exposiciones, debemos procurar equilibrar los tiempos evitando la saturación de información y dejando tiempo libre para los participantes.

¿Qué destinos puedes escoger?

Los destinos pueden ser tan variados como queramos. Los hay tradicionales de playa. en un hotel todo incluido o a un breve crucero.

Para las empresas que cuentan con más recursos tal vez un torneo de golf en un destino distante, un safari o hasta una travesía a bordo de un yate.

¿Qué tal un descenso por un río salvaje? ¿O un ascenso en globo por la madrugada? Y para los de edad más avanzada el senderismo u observación de flora y fauna.

Los paseos al aire libre brindan la oportunidad de interactuar de una forma diferente con los compañeros de trabajo, verlos en situaciones en las que pocas veces los observamos provoca un sentimiento de empatía y amistad.

Otras opciones son los viajes culturales, que incluye visita a algunas ruinas, museos, conciertos o hasta obras de teatro.

Algunas empresas están explorando las posibilidades de viajes de cooperación al desarrollo en donde el objetivo es la ayuda a las necesidades de cierta sección de la sociedad o comunidad.

Hora de afinar detalles

Una vez elegido el lugar, es indispensable que la persona encargada asista al lugar con anterioridad para afinar todo tipo de detalles y tener plena conciencia de los tiempos y movimientos, las actividades y los espacios con los que contará.

Al ser una minuciosa operación que busca obtener resultados para la organización, es indispensable dar seguimiento a los viajeros al regresar de su travesía.

Tomar sus puntos de vista y recomendaciones. Es loable no repetir ningún destino para que siempre exista entusiasmo y ánimo de parte de los empleados y cada viaje sea recordado de forma especial.

Existen personas y agencias que nos pueden ayudar a planear este tipo de viajes, siendo ellos los especializados pueden diseñar un programa ajustado a las necesidades de la compañía.

Sólo es cuestión de decidirlo y llevarlo a cabo, en poco tiempo podremos observar los resultados en la actitud y rostro de los empleados, pero sobre todo en el resultado de sus labores.

Y recuerda, #NuncaDejesDeViajar.