Si tuviéramos que mencionar a los países más devotos del mundo, seguro que Tailandia sería parte de nuestro top. Y es que aquí las creencias son respetadas y temidas por muchos, dando pie a santuarios en lugares sumamente insólitos… o ese es el caso del santuario de Lakshmi en el centro comercial de Gaysorn Village.
El SANTUARIO DE LAKSHMI… un deseo por AMOR
Laskhmi es la diosa hindú que se relaciona con la riqueza, la buena fortuna, la prosperidad, la belleza y la juventud; pero su mayor fama viene de dar suerte en el amor. Y es que millones de tailandeses acuden a los diferentes santuarios de Lakshmi para pedir por un ser amado; es ahí de donde surge la frase: ¡Le dije a la diosa Lakshmi sobre ti!
Es así como llegamos a Gaysorn Village: un complejo de edificios donde se encuentra una plaza comercial, que es el lugar donde la gente de Bangkok suele visitar el santuario de Lakshmi.
Indicaciones, PUBLICIDAD y ofrendas del Santuario de Lakshmi
Lo curioso de este santuario no es tanto su ubicación, si no la forma en la que se publicita, encontrando anuncios en internet invitándote a pedir un deseo, guías sobre cómo pedirlos y hasta indicaciones dentro de la plaza que te guiarán por los pasillos para poder llegar al santuario, que por cierto, se encuentra en un cuarto piso.
Una vez dentro, podrás notar que es un santuario de ofrendas; sin embargo, no se venden dentro, por lo que podrás ver a gente vendiendo flores de loto, inciensos e incluso paquetes completos de obsequios afuera de la plaza. También se aconseja preparar tu propia ofrenda, llevando leche, agua de coco, jugo de caña y frutas de sabores ligeros. Ojo: de preferencia todo tiene que ser color rosa.
Para poder entregar tu ofrenda también necesitarás una bandeja, pero estas si podrás encontrarlas en una mesa dentro del santuario; y así estarás listo para iniciar a mostrar tus respetos y pedir tu deseo. Una vez que hayas terminado, solo podrás regresar al santuario de Lakshmi una vez que tu bendición fuera cumplida.
Descubrir Tailandia es cosa de nunca acabar. Cada calle, pared y rincón esconden cientos de sorpresas, y el Santuario de Lakshmi es una que seguro no te vas a querer perder.
#NuncaDejesDeViajar