El desierto de Samalayuca. Si te propusiera un viaje por el desierto seguramente me verías con cara de ¿De qué estas hablado? No te culpo. Estamos acostumbrados a pensar que solo se trata de arena sin chiste.
Pero debes de conocer las actividades en el desierto de Samalayuca, ¡son geniales!
El desierto Samalayuca, Ciudad Juárez
Debo de aceptar que yo también era de esos que creía que el desierto no tenía nada que ofrecerme. Afortunadamente conocí las dunas de Samalayuca, un paraíso de aventura.
Cuando recibí la invitación de visitar las dunas me emocioné muchísimo, siempre había querido conocer Ciudad Juárez. Las ciudades fronterizas me parecen fascinantes.
Actividades en el desierto de Samalayuca
A la llegada lo primero que me paso por la cabeza fue pensar que se trataba de una ciudad muy moderna, ordenada y limpia. Nada parecido a lo que por años nos han querido pintar en los medios de comunicación.
Moría de ganas de recorrerla pero me interesaba más encontrarme con el desierto. Así que prepare mi cámara, me puse bloqueador solar y me lance a la aventura.
Para mi sorpresa las Dunas de Samalayuca se encuentran a solo 50 kilómetros de Ciudad Juárez. Un recorrido muy cortó en el que pude ponerme al tanto de todos lo que haríamos a nuestra llegada.
¿Qué actividades se practican en las dunas de Samalayuca?
Posiblemente la actividad más conocida sea el sandboard, uno de mis deportes favorito que no siempre tengo la oportunidad de practicar. Si aún no lo conoces se trata de deslizarse por la arena con una tabla.
Es muy emocionante y también seguro, si se llega a caer la arena amortiguara el golpe. ¡Eso sí! Lo duro es la subida, si no eres del tipo fitness al otro día tus piernas te lo recordarán.
Ya con la adrenalina al tope decidí probar la cuatrimoto, un paseo fuera de serie a través de pendientes, curvas y valles. No es nada parecido a alguna sensación que hubiera experimentado antes.
Desierto de Samalayuca
En ningún momento sentí que Samalayuca fuera un lugar desolado, tal vez sería porque iba en un grupo organizado o porque corría de un lado a otro para no perderme ninguna de las actividades.
La siguiente parada era el Bubble Soccer, una disciplina muy parecida al fútbol pero que se practica dentro de burbujas de plástico. Imagínate correr por arena dentro de una pelota tratando de anotar gol.
Claro, después de unos minutos nadie pela la portería, lo verdaderamente emocionante es derribar a los compañeros y ver como rebotan contra el suelo.
Namaste en el desierto
Para relajarnos después de tanta actividad física nos lanzamos a una degustación de sotol. Por si no lo conoces, el sotol es un destilado típico de Chihuahua parecido al mezcal.
Su sabor es intenso pero lleno de texturas y sabores de campo. Esta es una buena oportunidad para preguntarles a sus productores ¿Cómo se hace? ¿Cuánto tiempo se deja madurar? y ¿Con que se debe combinar?
Una cena inolvidable
Terminamos la meditación justo cuando entraba la noche. Poco a poco nuestros ojos comenzaban a adaptarse a la ausencia de luz cuando de repente un destello del otro lado de la duna nos sorprendió.
Tal vez suene algo excéntrico pero no hay nada como comerse un buen pedazo de carne mientras pierdes la mirada en obscuridad del desierto.
¿Quién lo hubiera pensando? Justo esa mañana me había despertado en mi cama en la Ciudad de México y ahora me encontraba cenando en medio de un desierto, en compañía de personas maravillosas.
Un poco más de esta aventura
En ese momento me sentí la persona más privilegiada del mundo, no solo por vivir una experiencia extraordinaria sino porque solo está disponible para grupos y con previa reservación.
Si ya te animaste a vivir el misticismo y las actividades en el desierto de Samalayuca, para ello puedes comunicarte con la empresa que lo organiza en su página web trifoliumcjs.com.
También puedes preguntar en su correo Contacto@trifoliumcjs.com o directamente con Jesús Ruvalcaba Razo al Tel. 01 656 609 1000 y 01 656 418 1603. Y recuerda, #Nuncadejesdeviajar