Las vacaciones siempre se llamarán “Vacaciones” si tienes un momento para relajarte y verdaderamente disfrutar que estás lejos de tu vida habitual, cómo un buen masaje.
Estando frente a la playa tomando una piñada, esquiando en una montaña alta, caminado sin rumbo por las calles de un pueblito mágico o despertando al llegar el desayuno hasta la comodidad de tu habitación…
Lo anterior parece un sueño y los ejemplos pueden ser muchos y muy variados.
Pero ¿Te has imaginado en medio de un profundo relax, con la selva en tu mente mientras alguien procura tu cuerpo como tu mismo lo haces?. Bueno pues entonces la recomendación es que tomes un tratamiento en un Spa.
Hyatt Ziva Cancún
Sabemos que el Spa es un paraíso de caricias y cuidados en donde te olvidas un poco de ti y de tu cuerpo para dejarlo en manos de los expertos en el cuidado de la piel, los músculos y articulaciones.
Así que la recomendación es que llegues a Zen Spa ubicado en Cancún dentro del nuevo Hyatt Ziva Cancún un resort con un concepto y arquitectura de vanguardia.
Masaje “Kukulkán”
Lo primero que debes hacer, es llamar a la recepción del Spa para solicitar un masaje de relajación. Un buen masaje Kukulkán en Zen Spa
Ellos cuentan con un menú para todos los gustos, pero en especial cuentan con un masaje llamado “Kukulkán” el cual te puedo decir que es una experiencia de sensaciones que te evoca a estar en la selva maya.
Así que deja tus pertenencias en el el locker, pónte tu traje de baño y encima la bata del spa y sigue las instrucciones del valet.
Es preciso mencionar que llegar a este remanso, con una suave música new age de fondo, y la aromaterapia de cítricos, ya es parte de entrar en un estado de desahogo y descanso.
Lo recomendable es que para abrir poros de la piel entres al sauna mientras la humedad y el calor de la madera benefician tu piel.
Alberca de sensaciones
Mientras llega la hora, lo recomendable es que te sumerjas en la alberca de sensaciones cuenta con algunas fuentes para relajar cabeza, espalda, cuello y cadera, escoge la caída de agua que mas te convenza.
También hay camas de burbujas de aire que simulan un delicioso cosquilleo en la piel.
Una vez afuera del agua, mientras te abrigas con tu bata y te recuestas en un cómodo y suave camastro. Déjate consentir con un cuello caliente relajante de hiervas.
Sólo falta esperar a que llegue tu terapista para encaminarte a tu cabina de masaje.
Masaje
Al entrar ahí y ver tu cómoda cama, la luz tenue, percibir el aroma a lavanda y una música a base de sonidos de la naturaleza.
Sabrás de entrada que algo mágico va a pasar. Así que después de las instrucciones recuéstate, cierra los ojos y déjate llevar.
Pero ¿Qué sucede? Las manos de la terapista se han convertido en una serpiente que pasea por ellas, la sensación es absolutamente nueva y desconocida. Tu mente enseguida registra un encuentro con la selva.
Recuerdos podrían perderse en instantes mientras sientes que la madera y las ramas de los arboles, rozan tu piel y recorren todo tu cuerpo hasta llegar a tu espalda y cuello.
De repente, sientes como un jaguar camina sobre ti, marcando sus huellas como si te oliera el cuello, y al llegar a los brazos quisiera llevarte como presa, recorrerá con sus garras cada dedo de las manos.
También recorrerá tu piel con su pico, o ¿serán sus garras?. La mente indica que es un águila, otro animal sagrado para los mayas.
Un sueño profundo
Quizá para ese momento tu grado de relajación es tan grande que caerás dormido, si es tu caso, déjate consentir por la selva.
Piérdete entre los sonidos, habrá momentos que confundas tu sueño con la realidad, y escuches lejanamente el sonido del agua de un manantial…
Habrá momentos que sentirás una tormenta de viento que te moverá en contra de tu voluntad, serás parte de una ofrenda o sacrificio maya al dios Kukulkán -o serpiente emplumada-
Bajo el famoso refrán después de la tormenta, llega la calma, también experimentarás que la naturaleza te recogerá y arropará…
Más relajación
Al sonido de una sutil campana, regresarás de vuelta a la realidad de estar en una cabina, la experiencia por la selva llegó a su fin, la terapista te llevará al área de descanso y relajación mientras degustas un té de frutos rojos.
No hay nada mejor que unas vacaciones en donde además de experimentar un verdadero descanso, cuides tu piel y tu cuerpo como debe ser.
Recuerda que este es solo uno de los tratamientos que ofrece este lugar, también hay un Masaje Zen que combina distintas técnicas distintas: sueca, shiatsu, tailandesa, reflexología y tejido profundo.
Otros masajes
Otros masajes son el de experiencia alrededor del mundo, el de piedras calientes, el prenatal, masaje de vino y el clásico masaje en un agradable palapa frente a la playa.
En cuanto tratamientos corporales puedes escoger entre la envoltura en lirio acuático, en fango aromático, en algas marinas, en chocolate o en café verde. Los faciales van desde un xtabentun, hasta uno de caviar.
Como verás hay distintas maneras de pasar unas verdaderas y relajadas vacaciones, solo es cuestión de apartar una tarde en tierras mayas para ¡Consentirte de pies a cabeza!
El hotel Hyatt te espera, así que #NuncaDejesDeViajar