Rusia es el país más grande del planeta, su extensión ocupa poco más de una novena parte de tierra firme, aquí se encuentra la Catedral de San Basilio en Moscú.
Por lo que no es de sorprenderse que cuente con impresionantes paisajes naturales, grandes centros urbanos y majestuosas obras arquitectónicas.
La cual se encuentra ubicada en Moscú, su sola imagen nos recuerda toda la historia del pueblo ruso desde la época de los zares pasando por la etapa de la Unión Soviética hasta la Rusia de nuestros días.
La Catedral de San Basilio, Rusia. Foto Archivo.
Basta con salir de la estación del metro Ploshchad Revolyutsii para empezar a sentir que nos acercamos a uno de los monumentos más representativos de la tierra.
La calle es angosta, sin embargo pronto da paso al espacio abierto más famoso de Rusia, la Plaza Roja y en su otro extremo la Catedral.
La Catedral de San Basilio. Foto Archivo.
Historia de la Catedral de San Basilio
La Catedral de la Intersección de la Virgen del Montículo o mejor conocida como “La Catedral de San Basilio”, es un templo ortodoxo construido a mediados del siglo XVI por orden del Zar Iván IV el terrible.
Para celebrar la victoria de Rusia sobre el Kanato de Kazán, un territorio que formaba parte del Imperio mongol de la Horda de Oro.
Rusia. Foto La Verdad Noticias.
Seis años fueron necesarios para concluir la obra ya que debido al frío sólo se podían hacer avances durante el verano.
Sus grandes cúpulas hipnotizan a cualquiera que se acerca, cada bóveda “encebollada” es una explosión de color con formas y detalles diferentes que parecen un puñado de caramelos.
La Catedral de San Basilio. Foto laSexta.
Al ingresar al recinto nos podemos percatar que la Catedral en realidad se ve más grande de lo que es. Sus muros fueron construidos extremadamente gruesos para aguantar intensas heladas que azotan la zona.
En su interior se pueden observar diferentes figuras religiosas, santos, hermosos mosaicos y detalladas pinturas.
Cúpulas de la Catedral de San Basilio. Foto Archivo.
La séptima maravilla de Rusia
San Basilio está formada por nueve capillas separadas, cada una de ellas dedicada a los santos que se celebran en los días donde Iván el Terrible ganó sus nueve batallas.
Con la construcción de la torre central se unifican todas las capillas creando así una gran e impresionante catedral, su belleza es extraordinaria que fue nombrada una de las 7 maravillas de Rusia.
Rusia. Foto HIPER FAIRS.
Muchos son los mitos en cuanto a su construcción pero la leyenda más conocida dice el Zar Iván el Terrible quedó tan extasiado con el resultado final.
Ordenó dejar ciego al arquitecto Póstnik Yákovlev para que no pudiera reproducir ninguna otra belleza como San Basilio.
La catedral de San Basilio en Moscú. Foto Mi Viaje.
La colorida Catedral fue una de las primeras obras que se pusieron bajo la protección del estado soviético como monumento de importancia nacional y desde 1923.
Sus puertas fueron abiertas para mostrarla como museo histórico, el cual podemos disfrutar todos los días con horarios diferentes dependiendo la época del año.
Monumento a Minin y Pozharsky. Foto Archivo.
La Plaza Roja
A las afueras de San Basilio encontramos la famosa “Plaza Roja” el centro neurálgico de Moscú y de Rusia entera.
Antiguamente era llamada “El incendio” ya que era frecuente ver fuego incontrolado de casas y puestos de madera, razón por la cual Iván III mandó a limpiar la zona y construir la plaza.
Desde su explanada podemos apreciar una vista inmejorable del Kremlin, sede del poder presidencial del país.
La plaza roja. Foto Bea Viajera.
También es posible realizar una visita al mausoleo de Lenin el cual está ubicado a los pies de la Torre del Salvador, ahí tendremos la oportunidad de observar el cuerpo embalsamado del político.
Se puede visitar de martes a domingos de 10:00 a 13:00 horas, en el interior está prohibido el uso de cámaras.
La Plaza Roja. Foto Archivo.
Como en cualquier plaza en el mundo, en este lugar ocurren todo tipo de eventos sociales que van desde desfiles militares por las fiestas de la Revolución Socialista hasta una serie de conciertos de artistas de moda.
Un dato curioso es que el nombre de “Plaza Roja” no tiene que ver con el color de los edificios que lo rodean, ni con el color del socialismo sino con la palabra Krásnaya que significa Rojo pero que en ruso antiguo significaba Bonito.
Rusia. Foto Mi Viaje.
Estar de pie en la Plaza Roja frente a estas estructuras es ver pasar la historia rusa frente a ti.
El vaivén de las personas que se dirigen a sus actividades diarias es emocionante y cotidiano, es ser testigo de un país libre, con una identidad única y bello en sus entrañas.
#NuncaDejesdeViajar