Jungfrau Suiza turismo significa “La doncella” en alemán, un nombre más que idóneo para una montaña que parece haberse maquillado de nieve esperando a que la visiten, mirarla a lo lejos provoca querer alcanzarla y conocerla.
Suiza es un lugar maravilloso en el centro de Europa que parece haberse distanciado desde hace mucho tiempo de todo lo que le acontece
A su alrededor, es un estado pacífico especializado y reconocido en la elaboración de chocolates, navajas y relojes.
Eternamente nevada
También ha sido el banco del mundo al cual todos quisiéramos acudir para invertir nuestros ahorros.
Sin embargo nada de esto se le compara cuando nos referimos a su naturaleza, las montañas parecieran protegerla, los ríos alimentarla y los valles consentirla.
Tal es el caso de Jungfrau una elevación eternamente nevada en los Alpes Suizos que deja sin aliento a todos los que la visitan.
Ferrocarriles en Jungfrau Suiza turismo
Existe un sistema de ferrocarriles por toda la zona que van surcando los valles, parten de la terminal Interlaken Ost y paran en estaciones intermedias.
Cada una de ellas nos da una perspectiva magnífica de los pueblos típicamente suizos, las casas de maderas con sus flores y banderas colgando en las ventanas.
Así mismo caminar en sus calles es como un sueño, es reafirmar ese cliché de la campiña con sus vacas y pastores, es más, casi podríamos asegurar que en cualquier momento podríamos encontrarnos a “Heidi” corriendo por los campos.
Lauterbrunnen, Jungfrau Suiza turismo
Uno de esos pueblos es Lauterbrunnen, una población escondida entre dos acantilados y una altísima cascada, desde su estación se puede abordar el primer tren con destino a tan deseado paraje.
A decir verdad nunca había visto un tren con semejante ingeniería y aunque ya cumplió su primer centenar de años de vida pareciera que hubiera sido construido ayer.
La forma inverosímil en que sube las montañas tan empinadas nos hace preguntarnos si resistirá la carga.
Es un largo camino pero nunca cansado, el bosque tupido con sus inseparables lagunas de agua cristalina parecieran haber salido de un cuadro de Bob Ross.
Mientras tanto el aire es ligero y el ambiente más que agradable.
Existe una estación intermedia que es el principal distribuidor de trenes en la montaña, su nombre es Kleine Scheidegg, un centro de entretenimiento en donde podemos encontrar restaurantes, tiendas y servicios.
Ciertamente es el punto de partida para los que quieren practicar el senderismo o escalar una de las imponentes caras de la montaña.
En este punto es conveniente contratar los servicios de un guía local si estamos interesados en realizar expediciones fuera del mapa turístico.
Eigerwand y Eismeer
Una segunda etapa empieza apenas abordamos el siguiente tren, el paisaje cambia drásticamente y no por lo blanco de la nieve sino por la ausencia de ella, de repente y casi sin darnos cuenta el tren se interna en la tierra través de un túnel gigantesco.
La oscuridad se adueña por interminables minutos mientras atravesamos la montaña Elger y la montaña Monch, en su camino existen dos paradas (Eigerwand y Eismeer) en donde podremos asomarnos fuera del túnel sólo para percatarnos que la belleza de los Alpes sigue ahí.
Estación Jungfraubahn en Jungfrau Suiza turismo
Por fin el tren se detiene y estamos ahí, en la estación Jungfraubahn la más alta de Europa.
Al abrirse las puertas la nieve nos recibe con una cegadora bienvenida, los entusiastas turistas corren hacia el cristal para tomar fotos y maravillarse con la imagen invernal.
El pico de Jungfrau tiene una altura de 4,158 metros sobre el nivel del mar, a sus alrededores es posible practicar deportes de invierno incluso en pleno verano, es común ver gente practicando Ski y Snowboard.
Para aquellos que les fascine el frío y quieran sentirse inmersos en un ambiente gélido existe un Palacio de hielo, el cual consta de una serie de pasajes, corredores, cavernas y esculturas talladas en hielo.
La única recomendación es que debemos ser muy precavidos y tomarnos del barandal en todo momento, el piso es altamente resbaladizo y no nos gustaría sufrir de una caída a esas alturas.
Glaciar Aletsch
Si eres de las personas que les gusta mandar postales no dejes pasar la oportunidad de presumirle a todos tus amigos el lugar en donde te encuentras, esto es posible gracias a la existencia de una oficina postal en aquel remoto lugar de los Alpes.
La estación cuenta con un acceso a un área abierta en donde es posible caminar sobre la nieve, sentir el aire que quema en la cara y admirar el paisaje.
A lo lejos se puede observar el glaciar Aletsch el más grande de Europa, con una longitud de 24 km y una extensión 120 km cuadrados.
Zona de Jungfrau
Y ya que llegamos hasta acá ¿Por qué no consentirnos de la mejor manera con una comida de primera? Es posible degustar los más deliciosos platillos de la cocina suiza en el restaurante “Crystal”.
El cual no sólo cuenta con envidiables ventanales panorámicos, también tiene una carta de alta gastronomía.
La zona de Jungfrau tiene todos las facilidades para hacer sentir al visitante como en su casa, si tu deseo es quedarte por varios días, la oferta hotelera es amplia y para todos los bolsillos.
Jungfrau Suiza turismo, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO
Es tan común ver a personajes del jet set así como mochileros en búsqueda de nuevas experiencias.
“El techo de Europa” no es un sitio digno de visitar sólo porque sea el más alto, sino porque su belleza arrebata el corazón de cualquiera.
Jungfrau Suiza turismo fue declarado Patrimonio de la Humanidad por parte de la UNESCO, convirtiéndose en un lugar que debemos proteger pero sobre todo es un punto obligado del planeta que todos debemos visitar.
#NuncaDejesdeViajar