Las mejores bromas que divierten a los turistas en la ciudad de Estambul son las de los heladeros turcos. Se trata de los vendedores “de risas” que también venden postres y al final te entregan un helado en compensación por sus especiales bromas.
Si tienes la sangre ligerita, es bueno que vayas a uno de los puestos de calle para que tú y tus amigos vean cómo los heladeros turcos te pone en mil dificultades para obtener un cono de helado.
Lo esconden en tu bolsa del pantalón, te lo quitan de la vista, te roban un beso, te dejan con la mano vacía después de darle decenas de vueltas frente a ti… ¡Son todos unos maestros del escapismo!
¿Qué necesitan estos heladeros para ser tan exitosos?
Pues primero deben tener un sentido del humor muy desarrollado, habilidad con la paleta o cuchara de metal, además de deliciosos sabores y claro, muchos conos.
Pero la realidad es que el éxito de sus habilidades es la pasta de helado congelado que lleva una masa de goma como ingrediente principal y este adquiere una elasticidad fuera de lo común.
Este secreto permite que hasta todo el helado de un cubo pueda entrar en un cono sencillo, pero no te emociones, eso nunca pasará, lo más que te llevarás a la boca es tu helado sencillo o doble, pero eso sí del sabor que gustes.
Se le conoce como helado turco “dondurma” es único en el mundo ya que además de la crema de helado le agregan el polvo de salep (harina de orquídeas moradas) y resina aromática (para endurecer), estos le dan un sabor especial y hacen que sea flexible.
Aquí te dejamos algunas experiencias de viajeros que son parte de esta tradición callejera de los heladeros turcos. No olvides que al visitar esta maravillosa ciudad de Estambul se torna muchas veces calurosa, así que ¡A degustar un delicioso e inalcanzable helado! #NuncaDejesdeViajar
