¡Llegó la época favorita de todos! Ya ha iniciado el ultimo mes del año y con ello la temporada navideña. Las personas alrededor del mundo ya empezaron a decorar sus casas y árboles, los niños ya le escriben sus respectivas cartas a Santa Claus y en Filipinas ya se prepara el festival de los farolillos gigantes.
Y es que en cada rincón del mundo, la navidad es una temporada llena de alegría y felicidad que se celebra de maneras muy peculiares. Las tradiciones y cultura se hacen presentes en cada uno de los festejos y las familias se emocionan por ver reunidos a sus seres queridos, y recordar a los que ya no nos acompañan. ¡Vamos a conocer este festival!.
La historia de los farolillos gigantes
Esta isla ubicada al sudeste de Asia, al igual que la mayor parte de América Latina, fue una colonia española por alrededor de 300 años. Aún después de su independencia, los nombres españoles, las calles y las tradiciones católicas perduran.
Si visitas Filipinas podrás escuchar que algunos de sus habitantes tienen nombres o apellidos en castellano.
De hecho, algunos ancianos ¡aun hablan español! gracias a que se les enseñó durante su educación básica y como en todas las antiguas colonias españolas, la navidad inició como una celebración católica con el nacimiento del niño Jesús.
Si nos adentramos en Luzón, exactamente en la ciudad de San Fernando conocida por ser la capital de las navidades se celebra hace mas de 100 años un festival conocido como Liglian Parul o internacionalmente nombrado “El festival de los farolillos gigantes”, en donde los habitantes de San Fernando compiten para ser elegidos como el mejor farolillo.
Conoce las impresionantes creaciones
Los faroles son un festejo que encierra las tradiciones de San Fernando y su historia. En sus primeros años se creaban con bambú y papel japonés, con los que se formaban grandes ruedas que eran decoradas con diversos patrones y colores en honor al Simbang Gabi o celebración religiosa previa a Nochebuena.
El festival tomó relevancia con el paso de los años gracias a la llegada de la electricidad en 1931, cuando se transformó en lo que conocemos hoy en día.
Desde su creación, nunca se habían apagado las luces de los faroles, fue mas bien hasta el año de 1972, cuando debido a la situación tan complicada por la que pasaba el país, las luces no se encendieron durante dos años.
Pero no te preocupes, pues hoy mas que nunca la celebración se encuentra en plano auge. Los habitantes de San Fernando crean farolillos ¡de hasta 12 metros de altura! con formas y colores diferentes y muy divertidos.
El plástico, la fibra de vidrio y los avances tecnológicos han sustituido al bambú y el papel japonés. En sus inicios los faroles se iluminaban con velas, pero ahora se usan series de luces y bombillas que crean increíbles diseños caleidoscópicos que ¡bailan al ritmo de la música! regalándonos así un espectáculo de otro mundo.
Algunos datos importantes
Los filipinos año con año cuentan los días para que el festival de los farolillos encienda sus luces y puedan mostrarle al mundo toda su creatividad e imaginación en esta competencia navideña.
La celebración usualmente tomaba lugar anualmente durante la segunda y tercer semana de diciembre y después de competir, los farolillos se exhiben en algunos puntos importantes de la ciudad, siendo un atractivo turístico para viajeros nacionales e internacionales
Debido a la gran cantidad de personas que lo visitan, hoy en día se celebra desde el 18 de diciembre y hasta el 1 de enero. El festival de los farolillos gigantes es un orgullo nacional, una tradición que enmarca la historia política del país y su avance social y tecnológico.
Si quieres disfrutar de una noche adentrándote en las luces de la ciudad con un espectáculo lleno de música, estás a tiempo de volar a este país y empaparte de nuevas experiencias. Y recuerda, #Nuncadejesdeviajar!.