¿Te has imaginado estar en un lugar recóndito rodeado de naturaleza y gorilas? ¿Harías un viaje a Ruanda con tal de ayudar a una de las especies más temibles, pero también más vulnerables del planeta? en el parque de gorilas en Ruanda es posible.
El sueño de Dian Fossey
Bueno, ayudar a los gorilas de Ruanda fue el sueño de la famosa investigadora y naturalista Dian Fossey.
Ella fue quien dedicó su vida a realizar campañas de protección a los gorilas de montaña cuando todo indicaba la pronta desaparición de esta encantadora especie.
Una muerte con legado, el Parque de gorilas en Ruanda
No fue un trabajo fácil para ella, pasaron 20 años de labor constante y de aprendizaje de los inteligentes primates para que después llegara la misteriosa muerte de la investigadora en su cabaña dentro del bosque.
Pero ella dejó este legado: conservar la especie y hacer conciencia de que el humano puede convivir con otros seres en un mismo entorno.
Así que, si te gusta la aventura y conocer nuevos y exóticos lugares, entonces esta expedición es para ti.
Prepara tu viaje al Parque de gorilas en Ruanda
Para realizar el safari debes asistir al Parque Nacional de los Volcanes, ubicado al sur de Ruanda, uno de los países más amables con el viajero cuando se trata de visitar África.
En Kigali, capital de Ruanda, puedes contratar el tour o safari y especificar que deseas tener un encuentro con estos enormes amigos.
Al ser una especie protegida, son muy pocos los afortunados que pueden tener el encuentro con gorilas durante una hora.
Debes saber que llueve dos temporadas al año: de octubre a noviembre, y de mediados de marzo hasta finales de mayo; tenlo presente porque los senderos se ponen lodosos.
Apenas llegues al parque, prepara tus piernas y comienza las subidas y bajadas por los serpenteantes senderos. No olvides hacer algunas escalas para observar los maravillosos paisajes que te ofrece la montaña Virunga.
El color verde estará presente todo el tiempo en las praderas, la espesa selva, bosques de bambú, pantanos, lagunas, montañas y por supuesto los árboles que te protegen del sol y de la inesperada lluvia.
El Parque de gorilas en Ruanda es tan grande que alberga a cinco de los ocho volcanes que se encuentran en la zona.
En busca del Gorila de Montaña
En esta zona protegida, se ubican más de 300 gorilas de Montaña en completa libertad. Hay algunos grupos que están familiarizados a tener contacto con los humanos.
Debes estar atento a las instrucciones del guía para el momento que puedan acercarse sigilosamente.
Durante el recorrido podrás observar monos dorados, búfalos, elefantes, jirafas y una gran variedad de animales locales. El guía sabrá por dónde llevarte para que puedas ver lo mejor de esta montaña sin ningún peligro.
Como parte de la aventura de la selva húmeda, habrá momentos en los que te enfrentarás por algún pantano o cruzar solo un río embravecido. Por lo tanto, no te separes del guía por ningún motivo.
El paseo puede ser un poco pesado ya que pondrás a prueba tu estado físico; pero cuando llegues a la cima de la montaña, verás encantadoras vistas de Ruanda y sabrás entonces que el esfuerzo ha valido mucho la pena.
Encuentro con la especie
Al momento de llegar al lugar donde se encuentran los gorilas, los guías te darán una serie de recomendaciones. Una de las más importantes es que no tomes fotografías con flash porque a los primates les incomoda.
No te acerques demasiado a ellos y adopta una posición sumisa si es que el líder se encuentra cerca.
Si notas algún comportamiento agresivo con uno de estos gigantes, no lo mires a los ojos, ya que para ellos es una provocación; mejor mira hacia abajo hasta que se vaya.
Recuerda que para tener un encuentro fascinante, deberás acatar ciertas instrucciones como: no correr, no gritar, no escupir ni hablar en voz alta.
Ahora sí, una vez que están tranquilos y tu relajado, disfruta de la experiencia de estar ahí y de la magnificencia de los gorilas de montaña.
Podrás contemplar su gran estatura, su hermoso pelaje negro (a veces enredado), y sus expresivos ojos color ámbar.
Aprenderás mucho con tan solo mirarlos, descubrir su cotidianidad y entender sus comportamientos como parte de nuestro pasado ancestral; verás que si tenemos mucho en común.
Todavía puedo imaginar cómo Dian Fosey pasaba días enteros estudiando los hábitos de los gorilas y buscando la manera de cómo expresarle al mundo lo fascinante que es convivir y al mismo tiempo cuidar todas las especies que tienen derecho a habitar en la tierra.
No olvides visitar su campamento y aprender de todo lo que ella dejó escrito acerca del comportamiento de esta fascinante especie.
Recuerda que al hacer esta expedición ayudas a consolidar nuevos proyectos e investigaciones de esta y otras especies animales.
Si tienes oportunidad de ver la película “Gorilas en la Niebla” que se realizó en honor a esta naturalista, quizá será el primer paso para tomar la decisión de hacer una expedición por esta fascinante tierra de gigantes.
Si quieres contribuir al cambio, ahora sabes que el Parque de gorilas en Ruanda es un gran punto de inicio, planea este próximo viaje y vive la experiencia ¡Ah! y recuerda, #NuncaDejesDeViajar.