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El Llanito en Dolores Hidalgo, pueblo Otomí.

El Llanito, pueblo Otomí en Dolores Hidalgo. Guanajuato. Imagen. Archivo

Portada. Imagen: Archivo

El Llanito, pueblo Otomí en Dolores Hidalgo. Guanajuato. Imagen. Archivo
Pin. Imagen: Archivo

Existen ciudades y pueblos como el llanito de Dolores Hidalgo, que han envestido a las culturas que habitaban en ellos y quedaron en el olvido, poblaciones enteras se han dejado llevar por la trasculturización. Y poco a poco se diluyen entre la tierra prometida de los dioses prehispánicos.

Recientemente hice un viaje a “El Llanito” lugar en medio de Dolores Hidalgo, Pueblo Mágico que busca conservar sus tradiciones al guardar una comunidad Otomí de unos 400 años de antigüedad.

Resulta que se fundó en un terreno llano -de ahí su nombre- ya que antes la población se encontraba a las orillas de un río cercano.

Angelito. Imagen: Archivo

Con las crecientes lluvias del río, la población se vio obligada a moverse a ese enorme terreno, pero como testimonio dejaron una veintena de capillas – unas más pequeñas que otras-.

Y bien vale la pena tomarse un día para conocerlas, se sabe poco de ellas, pero la mayoría están dedicadas a San Antonio.

Estas capillas servían para marcar el territorio conquistado espiritualmente. En la época colonial fueron parte del famoso Camino Real de la Plata.

Iglesia. Imagen: Juan Carlos Fonseca Mata

El llanito en Dolores Hidalgo: Camino Real de la plata

Ruta por donde pasaban las carretas repletas de lingotes de argento -marcados con el sello de la reina- para llegar a México.

Después a Veracruz para que se embarcaran con destino a España.

Como es sabido, la mezcla de culturas -religiosa y prehispánica- se fusionaron con el paso de los años, destruyendo entonces los basamento prehispánicos para ser desplazados por capillas virreinales.

Templo. Guanajuato. Imagen: Archivo

Sin embargo, en estos lugares se puede observar la arquitectura característica de arte tequitqui en donde la gente construye sus templos con necesidades y características físicas muy locales.

Como resultado se obtienen angelitos morenos de rasgos indígenas, flores y animales propios de la región.

Estas tierras como la mayoría en Dolores hidalgo pertenecieron a la “Hacienda de la Erre” de los Mariscales de Castilla.

Templo. Imagen: Juan Carlos Fonseca Mata

Leyenda

Cuenta la historia que uno de los custodios que vigilaban el río – para que no se saliera de su cauce y se llevará las casas y templos-, vio flotar un cuerpo sobre las aguas.

Al avisar a la comunidad, todos ayudaron a sacar al cuerpo, pero cuál fue su sorpresa: se trataba de un Cristo hecho de pasta de caña.

Era un milagro como todos aquellos que los evangelizadores inventaban para introducir la religión católica a las comunidades vulnerables de fe.

Templo. Imagen: Archivo

Como la zona era propiedad de la Hacienda de la Erre, el Cristo pertenecía a los dueños de la finca; por petición de la comunidad, los Mariscales de Castilla donaron al Cristo que venerado como milagroso desde ese entonces como San Salvador de los Afligidos.

El llanito en Dolores Hidalgo: Templo

Hoy en día, este es el hogar de San Salvador de los Afligidos, los habitantes custodian la imagen y al templo con mucho recelo.

Si te acercas a la puerta hay un nicho con un divino rostro, que fue pintado por Miguel Martínez de Pocasangre.

Autor de la iglesia ubicada en Atononilco (conocida como la Capilla Sixtina de América) quien fue contratado para plasmar su obra en la capilla abierta de este templo.

Templo por dentro. Imagen: Archivo

El inmueble actualmente está en recuperación por parte del INAH, pero, sí se puede apreciar la belleza de su arte que ha sido sacudido por la humedad y el tiempo por su ubicación en la parte posterior del templo.

Así mismo en el exterior podrás apreciar las torres, el reloj de sol y los distintos nichos que se encuentran en el atrio que custodian pinturas al fresco y muestran los pasajes del víacrucis.

En el interior del templo, verás siempre algún guardián otomí que vigila al milagroso Cristo, que se visita sobre todo en fiestas como el 3 de mayo día de la Santa Cruz, el 6 de agosto, día de San Salvador; y la fiesta grande, del 31 de diciembre al 1° de enero.

Llavero. Imagen: Archivo

El milagroso Cristo

El milagroso Cristo está hecho de pasta de caña, técnica de más de 400 años proveniente de la región de artesanos michoacanos, sus características son muy trágicas y sangrantes además de su morena tez. Todo con un significado meramente evangelizador.

Ahí mismo, hay dos pinturas de Jerónimo Ramírez que están al fresco, además otras dos pinturas que son óleo sobre tela que están pegadas a la pared.

Originalmente no pertenecían a este templo y quizá en algún momento fueron parte de alguna de las capillas del otro lado del río o alguna donación de la misma Hacienda de la Erre.

Puerta. Imagen: Juan Carlos Fonseca Mata

Curiosamente una de las pinturas trata de la donación del Cristo encontrado flotando en las aguas y el momento en que los Mariscales de Castilla lo entregan a la población. La pintura es anónima.

El llanito en Dolores Hidalgo: Museo de Ex votos

Esta población cuenta con el único museo rural de exvotos, dedicados a San Salvador de los Afligidos, varios fueron rescatados de las distintas capillas o han sido donaciones de las mismas familias.

Recuerda que los ex votos era la forma de agradecer los milagros recibidos a través de una pintura con su leyenda de una manera muy animada.

Dentro de este arte indígena era básico un reflejo de San Salvador realizando el milagro. Podrás ver más de 100 obras de este interesante arte.

Templo. Guanajuato. Imagen: Archivo

Chamanismo

Cada 31 de diciembre para amanecer el 1° de enero se reúne un grupo de chamanes o brujos para hacer un ritual con toda la discreción y recelo para dejar atrás todos los males y comenzar un año nuevo completamente limpios y sanos.

La comunidad otomí se reúne en la capilla procesional para hacer las ceremonias o “limpias” y de allí se desplazan al templo principal donde está San Salvador de los Afligidos.  

Es una época de verbena, los vestidos tradicionales son muy característicos, la venta de productos y alimentos del campo como frijoles o nopalitos, son muy socorridos.

Frijol. Imagen: Laisha np

El llanito en Dolores Hidalgo: Tortilla sellada ceremonial  

De entre los alimentos destacan unas tortillas características de las festividades otomíes, alimento a base de maíz que es parte de la dieta de cualquier mexicano, pero en esta comunidad tienen la particularidad de tener figuras y colores ¿Cómo es esto?

Se trata de una tortilla normal delgada que una vez pre cocida en el comal y antes de voltearla e inflarse, debe pasar por un sello de madera previamente pintado con tintes naturales.

Se fija el sello en la tortilla para que tome el color y la figura, se retira y regresa al comal. Es un proceso rápido y es estampar arte a los alimentos.

Tortilla sellada. Imagen: Archivo

¿Qué son las figuras plasmadas en las tortillas?

Las figuras son variadas con diseños que van desde la fauna de la región como coyotes, conejos o venados,o imágenes y escudos religiosos como San Salvador de los afligidos.

Los sellos están hechos de madera de árbol de mezquite o de patol (ese que da los frijolitos rojos), normalmente son hombres los que tallan este instrumento de cocina y las mujeres son quienes los heredan de generación en generación ¡Hasta 100 años!

Los sellos deben tener un cuidado especial como secarlos a la sombra o curarlos con ruda .Los colores son varios y se obtienen de los ingredientes que la naturaleza ofrece desde épocas remotas.

Sello para tortillas. Imagen: Archivo

Por ejemplo, el verde se obtiene de la espinaca, la acelga o la alfalfa; el color morado es el resultado de machacar una planta local llamada muicle; el color amarillo se logra del famoso cempasúchil, el rojo del betabel, el cual también en menos cantidades, se puede tornar a color rosa.

Cabe mencionar que las tortillas con sello no son parte de la dieta cotidiana, se preparan en eventos especiales como bodas, ceremonias, fiestas patronales o en muestras gastronómicas.

Se venden por docena o cuarterones (un kilo 400gm.) y se acompañan de arroz, mole, garbanzos, sopa de jamaica, sopa de verduras y también se hacen taquitos de chicharras (pedorras) insecto previamente empanizado o capeado.

Diferentes sellos para tortilla. Imagen: Archivo

No te pierdas en tu próxima visita a Dolores Hidalgo, un encuentro con esta comunidad otomí que tiene una cultura fascinante que a pesar del tiempo y la mancha de la modernidad, sigue viva y guarda herméticamente sus tradiciones.

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Y recuerda #Nuncadejesdeviajar.

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