Cada vez que vamos a un lugar con ondita, podemos encontrar uno de los souvenirs más populares y bonitos para llevar a casa: un atrapasueños que nos recuerde esa playa, pueblo, ciudad o comunidad que nos dejó huella en un viaje inolvidable.
Un regalo que nos auto-hacemos para cuidar nuestro sueño, o para obsequiarlo a esa persona especial y decirle que te preocupa su forma de descansar.
¿Qué significan los atrapasueños?
Tienen un significado místico pero a la vez fascinante y no podemos negar que deseamos de todo corazón que sea un remedio efectivo.
Para entender un poco más, los atrapa sueños son objetos que nacieron de una leyenda en el norte de América procedentes de uno de sus pueblos nativos: “Ojibwa”. Se trata de un talismán que brinda protección durante las horas de sueño.
Pueblos como los indios apaches también adoptaron algunas costumbres al usar estos amuletos, recordemos que las culturas del norte son muy similares y antes no había fronteras.
Así fue como estas tradiciones también llegaron a México y se hicieron muy comunes en comunidades norteñas como el grupo Kikapú, asentado en la comunidad Tamichopa, en el municipio de Bacerac en la Sierra Alta de Sonora y en Muzquiz, al noroeste de Coahuila.
También los indios Mayos en la comunidad de Masiaca en Sonora, o los Rarámuris de Chihuahua, aguardan esta tradición con un gran cariño; Debes saber que los grupos étnicos de México tienen una arraigada esta costumbre de tejer atrapasueños.
Homenaje a las arañas
La analogía es muy sencilla; si su nombre “asabikeshiinh” significa araña (de acuerdo a su lengua nativa), entonces se entiende que la función es filtrar lo negativo atrapando las pesadillas en la telaraña y sus cuentas, para así dejar fluir los sueños positivos.
Además, esa red mística permitirá que los malos sueños atrapados se quemen o se vayan por la mañana con los primeros rayos del sol. ¡Qué fascinante!
La leyenda cuenta que en la aldea una Asibikaashi o mujer araña, cuidaba a los niños y a los adultos durante las horas de sueño, pero al crecer la comunidad no podía estar al pendiente de todos y consolarlos.
Ella pidió consejo a los sabios y solucionaron crear un amuleto simbólico para evitar pesadillas; así un grupo de mujeres tejieron unas redes en unos aros a manera de filtrar los sueños.
Quizá este es el origen de estos amuletos que se fue extendiendo por todo el continente y posteriormente en todo el mundo.
¿Cómo se hacen los atrapasueños?
Se trata de un circulo hecho a base de ramas de sauce el cual se le bordan hilos que se entrelazan en el centro, algunos en forma de telarañas o de distintas formas de flores o figuras asimétricas.
Es decorado con cuentas o piedras donde se encierra todo lo malo; y plumas de aves de la región, estas tienen la función de hacer volar los sueños.
Ciertamente existen distintas creencias y significados que tejedores de atrapasueños sostienen. Por ejemplo, que se utilizan como instrumentos de poder de la medicina Chamánica.
Por otro lado los sioux o dakotas del norte de América afirman que los talismanes atrapan los sueños agradables que no recordamos y estos van bajando poco a poco por las plumas hasta llegar a las personas.
Cualquiera de los casos es valido, lo importante es que en todos coincide que los atrapasueños son objetos de protección.
Por lo tanto, las personas que los adquieren los colocan sobre la cabecera de la cama para evitar las pesadillas y malas vibras.
Hoy esta artesanía se sigue realizando con distintos materiales y algunos elementos que se han ido añadiendo de acuerdo al artesano que los elabora. Finalmente se trata de un souvenir que todos hemos adoptado.
Una tradición ancestral
En México, me ha tocado ver distintos y coloridos atrapasueños desde Tijuana hasta Playa del Carmen, pasando por San Luis Potosí, Guanajuato, Nayarit, Querétaro, Sonora y muchos estados más.
Cuando veas un lugar donde venden estos maravillosos amuletos, créeme que quien lo tejió está interesado en el bienestar de las personas.
Así que lleva uno, ponlo cerca de tu cama y cuando lo veas, recuerda ese maravilloso viaje y lo bien que la pasaste. Ahora sí, ¡A dormir tranquilamente!
Y recuerda ni en tus sueños #NuncaDejesDeViajar.