No hay algo más relajante en un viaje que adentrarte en la selva o en un bosque y contemplar cómo es la vida ahí adentro. Conoce el bosques de algas marinas gigantes en Baja California.
Pero ¿Sabías que también lo puedes hacer bajo el agua? Existen enormes ecosistemas que son parte de la vida marina de los océanos mas profundos del planeta.
Sumergirte en las profundidades del mar y encontrarte rodeado de un bosque de plantas que desean alcanzar los rayos del sol, estas crecen verticalmente y danzan al ritmo de las olas como sirenas.
Los bosques de algas marinas son la contraparte de las selvas en la tierra y son igual de importantes para regular las especies bajo un hábitat perfecto ya que son de alta productividad.
Se les conoce también como “Macroalgas” debido a su gran tamaño, ¡Van de 30 hasta 80 metros de altura!
Existe de todo para todos
A pesar de que estos ecosistemas son propios de aguas templadas y polares, también estos bancos de plantas marinas de distintas especies se pueden hallar en zonas tropicales, pero a mayor profundidad.
En Baja California, México, aproximadamente a 95 kilómetros Océano Pacifico adentro, se encuentra un archipiélago de tres islotes; Su nombre es:
Islas San Benito, se trata de menos de cinco kilómetros cuadrados de extensión de tierra un poco desértica, en donde viven matorrales y cactus que son parte del ecosistema arenoso.
Llama especial la atención cuando te vas acercando a los islotes, y se puede apreciar claramente la vegetación verde y amarillo ocre al fondo de un mar color turquesa. ¡Un contraste impresionante!
No es menospreciar la parte terrenal, pero lo bello de este lugar se encuentra ahí abajo, solo necesitas sumergirte ya sea buceando o con tu equipo de snorkel.
El mar es tan claro que podrás disfrutar el escenario y la nitidez del agua a unos 30 metros de profundidad.
Un jardín submarino de ensueño
Se trata de un hermoso jardín surrealista bajo el fondo, cientos de enormes plantas gigantes en forma de helechos te dan la bienvenida bailando sutilmente y dejándose llevar por la marea. Son los llamados kelps.
Cada planta se le conoce como talo y está compuesta de raíz, tallo y hojas, estás últimas son las que absorben los nutrientes del mar y provocan la fotosíntesis para su supervivencia.
Un dato curioso es que donde nacen las hojas se alojan neumatocistos, unos organismos celulares que proveen gas y flotabilidad a las plantas y esto permite que estas se mantengan verticales y de pie todo el tiempo.
El momento es mágico cuando los talos amarillos y verdes se tornan a rojo y café debido a que te vas acercando al fondo donde reciben menos luz y nacen estas algas.
La vida marina entre peces y corales distintos es todo un espectáculo digno de atrapar con tu cámara de agua.
Un dato curioso es que donde nacen las hojas se alojan neumatocistos, unos organismos celulares que proveen gas y flotabilidad a las plantas y esto permite que estas se mantengan verticales y de pie todo el tiempo.
Un hábitat que beneficia a muchas vidas
El bosque marino representan el hábitat para distintos tipos de peces como el roca o el Garibaldi, crustáceos como caracoles y langostas; y mamíferos como ballenas y leones marinos.
Pero además son fuente de alimento para gaviotas, cormoranes y distintos tipos de garzas. Todos se benefician de los bosques marinos y afortunadamente son fáciles de reproducirse.
Mucho se ha investigado de estos laberintos danzantes, se dice que cada talo crece unos 50 centímetros por día. Las algas son portadoras de una gran cantidad de nutrientes como potasio y fósforo.
Atraídos por los bosques de algas marinas gigantes en Baja California, lobos marinos son el invitado especial a la aventura por recorrerlos, su cuerpo hidrodinámico hace parecer que nadar entre las plantas es fácil.
Así que te recomendamos tomarlo con calma y mejor disfrutar de sus piruetas entre las plantas, y mientras tú exploras más esta experiencia marina.
Para contratar esta tour, te puedes acercar a los operadores turísticos ubicados en Ensenada, Baja California para visitar las Islas San Benito o preguntar por Puerto Zepellin (o Campo Keneddy).
¡Recuerda que es una actividad controlada y no se vale tocar ni llevarse recuerditos! #NuncaDejesDeViajar