Japón, el país del sol naciente, es un destino turístico que siempre tiene algo que sorprende a todo mundo. Ya sean sus místicos templos, su sacrilegiosa comida o sus divertidas calles, todos encuentran su sitio ideal en Japón… Incluso los amantes de los autos. Daikoku Futo es un enorme estacionamiento abierto a todo público, ubicado en la ruta Daikoku de la prefectura de Kanagawa, justo al sureste de Japón.
Por el día, es un estacionamiento común y corriente… Autos estacionados en medio del lugar, el sol brillante iluminando los parabrisas y la acera caliente por la falta de árboles. Pero al caer la noche, se convierte en todo un templo del mundo automotriz. Arrancones, autos intervenidos y mucha diversión inundan el ambiente con olor a gasolina y llantas quemadas.
El MUNDO SECRETO de Daikoku Futo
Llegar a Daikoku Futo es una tarea complicada. Lo ideal es ser acompañado de un guía local que conozca el laberíntico recorrido de puentes que se encuentran alrededor. Usualmente toma una hora llegar desde Tokio. Pero todo valdrá la pena cuando te encuentres cara a cara con hermosos vehículos japoneses a cargo de hábiles pilotos urbanos, que solo buscan estar cerca de la adrenalina.
Desde los 90, Daikoku Futo ha sido usado por jóvenes —y no tan jóvenes— como centro de reunión para amantes de los vehículos y la velocidad. Es como un lugar de exhibición de autos urbano, donde solo los vehículos más rápidos se pueden hacer presentes. Prácticamente leyendas.
Daikoku ha sido inspiración para películas y videojuegos, además de ser el escenario de aclamadas películas como Rápidos y Furiosos: Reto Tokio, o videojuegos icónicos como Need for Speed: Tokyo Drift. Suele ser tan emocionante que casi siempre, hay presencia de seguridad policial.
¿Qué se VE en DAIKOKU FUTO?
Si llegaste a Daikoku Futo es porque sabes bien sobre la industria automotriz japonesa… JDM (Japanese Domestic Market o en español, Mercado Doméstico Japonés). Vehículos fabricados y vendidos en Japón con estrictas regulaciones y especificaciones locales.
Estas duras restricciones obligaron a muchos amantes de los autos a intervenir sus vehículos para hacerlos a su gusto… Más velocidad, pintura emocionante y hasta luces y equipo de audio han sido parte de las modificaciones mecánicas y estéticas de los autos japoneses, dando como resultado perfectas obras de arte.
Aquí podrás ver algunas de las leyendas japonesas más icónicas del mundo de los JDM, como el Toyota Supra, el RX7 o el legendario Skyline R32. Pero no solo verás autos modificados para correr o hacer drifting, pues Daikoku Futo también tiene un espacio para los kaido racers, que buscan destacar por sus formas extravagantes y colores exóticos inspirados por los Super Silhouette: un estilo de carreras japonesas de los años 70 y 80.
Un ESPACIO al AUTO EXTRANJERO
Daikoku no solo es hogar de autos deportivos japoneses, ya que también encontrarás deportivos de todas partes del mundo: clásicos alemanes, como el E36, italianos, como Ferrari, o americanos de la vieja escuela. Cada visita es única y siempre encontrarás autos diferentes…
Pero ojo, pues si quiere entrar al templo de los autos, es necesario entrar en uno. Ya sea taxi, un auto prestado, rentado o con amigos que tengan auto en Japón. El lugar está abierto todas las noches, pero la experiencia es mejor los viernes, sábados y domingos, que es cuando más autos de todas partes de Japón se reúnen para convivir y compartir su amor por los autos.
El DRIFT KING escapando de DAIKOKU FUTO
En Japón, la cultura de los autos deportivos se centra en las modificaciones, las carreras y el drift. De hecho, fue ahí en Japón donde nació este estilo de manejo único. El drifting fue creado por el expiloto japonés Keiichi Tsuchiya, ganador de las 24 Hours of Le Mans de 1995 (una carrera de resistencia en Francia). Esa técnica de derrape poco convencional ganó popularidad en las carreras profesionales.
Pero Daikoku Futo solo es el inicio, pues al terminar la noche, los pilotos de estos increíbles autos se dirigen a otro de los centros más importantes de la cultura automotriz. Umihotaru: Se trata de otro estacionamiento en medio del mar, en lo que antiguamente fue un barco de carga, pero que ahora se ha convertido en un estacionamiento y centro para correr, competir y hacer trucos tras el volante.
Si te gustaría entrar a Daikoku Futo, existen agencias que te llevan a vivir este increíble mundo, como Civitatis o Tokio Xtreme Drive. Lo único que tienes que hacer es pagar la entrada del estacionamiento y el costo del recorrido. Así que prepárate para vivir la verdadera pasión por los autos, donde solo hay un requisito: querer adrenalina… ❖
#NuncaDejesDeViajar