Seas extranjero o mexicano, aquí encontrarás la forma de cómo llegar a Tequisquiapan “Lugar sobre aguas de tequezquite”, el hermoso Pueblo Mágico de Querétaro.
Te contamos cómo llegar de 3 formas diferentes, sea cuál sea, lo más importante es que, ¡Disfrutarás tu viaje en este maravilloso lugar!
Cómo llegar a Tequisquiapan
Llegada en auto desde la CDMX
Desde CDMX, aproximadamente tardarás 2 horas y media en llegar, cómo resultado recorrerás un total de 190 kilómetros.
Las principales rutas de salida de la ciudad son: Circuito Bicentenario, Periférico Norte o Circuito Exterior Mexiquense, utilízalos y te llevarán a la carretera principal con Querétaro.
Tendrás que incorporarte a la Carretera Querétaro-México 57D, después continúa por la Carretera Querétaro-México/Polotitlán, además puedes seguir las señales a Peña de Bernal.
Por último, permanece en la Carretera San Juan del Río-Tequisquiapan y 15 kilómetros más adelante llegarás a tu destino, ¡A disfrutar!
Cómo llegar a Tequisquiapan en avión
Deberás comprar un vuelo con destino a Querétaro, debido a que, Tequisquiapan no cuenta con un aeropuerto propio.
Sobre todo, el Aeropuerto Internacional de Querétaro cuenta con conexiones de todos los aeropuertos de México y con algunos de Estados Unidos.
Saliendo del aeropuerto, podrás rentar un auto o tomar un taxi, después deberás tomar la Carretera Querétaro-Tequisquiapan a la salida a la Carretera San Juan del Río-Jalpan de Sierra, finalmente 2 kilómetros, inmediatamente estarás en el centro de éste Pueblo Mágico.
Llegada en autobús desde la Ciudad de México
Desde la Central de Autobuses del Norte ubicada en el Eje Central Lázaro Cárdenas #4907, pero, compra un boleto con destino a la Terminal de Autobuses de Tequisquiapan en la línea de autobuses de tu preferencia.
En promedio, los boletos tienen un costo de $250 y el tiempo de llegada es de casi 3 horas. Sin embargo, disfrutarás mucho en viajar en autobús y admirar los paisajes durante el recorrido.
Ahora ya conoces cómo llegar, por lo tanto, no tienes pretexto para no visitar el Pueblo Mágico de Querétaro.
Y recuerda, ¡Nunca dejes de viajar!