La Ciudad de México se caracteriza por ser un lugar con muchos sitios con leyendas. Éstas, han dejado como evidencias objetos, personas y casas embrujadas; es por eso que en esta ocasión te contaré sobre las casonas de terror en la CDMX más famosas.
Casonas de terror en la CDMX – La Casa Negra
Ubicada en la colonia Roma, es una residencia porfiriana que nunca se rescató de los estragos del tiempo. La Casa Negra sería un refugio ideal para los vagabundos que buscan un lugar donde esconderse de las inclemencias del clima.
Sin embargo, en este lugar se dan cita un gran número de fenómenos paranormales que han aterrado a todos los que han tratado de pasar la noche ahí.
También cuentan que, pasadas las diez de la noche el ambiente se torna pesado y la temperatura desciende drásticamente.
Pero de pronto se empiezan a escuchar ruidos a lo largo del lugar, las puertas empiezan a abrirse y cerrarse.
Los ruidos se convierten en voces y gritos de sufrimiento, los objetos dentro de la habitación empiezan a flotar, mientras que manos invisibles comienzan a jalarte y empujarte, como si quisieran que salgas del lugar.
Las personas que han tratado de remodelar el lugar han terminado negándose a hacerlo. Además, aseguran que la misma casa les impide que realicen su trabajo, quedando nuevamente en el abandono total.
La Casa de las Brujas (Colonia Roma)
Se le conoce como el Castillo de las Brujas por los techos de dos aguas que se asemejan a un sombrero de bruja y por las ventanas con arcos que dan la ilusión de ser ojos. Con ese aspecto, no es de extrañar que durante mucho tiempo fuera objeto de historias y leyendas.
Se dice que allí vivió una chamán o bruja a quien llamaban “La Pachita”. Se hizo famosa porque en las décadas posteriores a la Revolución, personajes de la vida pública del país acudían a consultarla y ella no cobraba su trabajo.
Por los rituales practicados en esta casa se cuenta que hay fantasmas atrapados y espíritus que molestan a las personas que han habitado recientemente el inmueble, escuchando ruidos extraños e incluso, observando presencias desconocidas a todas horas.
El Callejón del aguacate (Coyoacán)
Cuentan que un militar frío y solitario que vivía sobre el callejón, solía dar la vuelta por este lugar, percatándose continuamente de la presencia de un niño que anhelaba jugar con él porque le atraía su uniforme y trajes oficiales.
Al militar le molestaba que se le acercara el niño insistentemente por lo que en un momento de desesperación, lo golpeó brutalmente llevándolo hasta el árbol en la esquina del Callejón del Aguacate, y lo ahorcó colgándolo en el árbol.
En este callejón, ubicado en Aguacate, Colonia Santa Catarina en Coyoacán, se oyen los gemidos y la presencia del niño, inclusive su cara de sufrimiento se forma en el tronco del árbol. Los que visitan el lugar a media noche dicen que el ambiente es lúgubre y tenebroso.
La Casa de la tía Toña (Chapultepec)
Esta casa está situada en la 3ª sección del Bosque de Chapultepec, con sólo vegetación y barrancas a su alrededor.
Para llegar a la finca hay que cruzar un puente, una vez que lo logras, se oye como si piedras grandes o bultos cayeran en el río, se escuchan voces, susurros y ruidos desde el bosque.
Una de las cosas más extrañas es que, después de cruzar el puente se percibe una vaga niebla que comienza a circular por la zona. Al llegar a la casona es normal ver la cara de una viejita asomada en los viejos y empolvados ventanales, esperando a los visitantes.
#NuncaDejesDeViajar