La bella Ciudad de México ha estado en una constante transformación con Calle Bucareli en la CDMX y el paso de los años.
Poco a poco colonias transforman sus fachadas, jardines y le dan una nueva vida comercial y habitacional al área, así se ponen nuevamente de moda en el mapa citadino.
Un gran historia detrás
Pero hay algunos puntos importantes que aún siguen con ese aire de abandono, producto del paso del tiempo, esperando que sean admirados por su bella arquitectura y aspirando quizá algún día a ser rescatados.
Pero mientras sus muros parecen guardar historias fantásticas de su época de bonanza.
Bucareli fue y hasta el momento es, una de las avenidas más importantes de la Colonia Juárez.
Una avenida importante
Conecta con el Centro Histórico y su cercanía con la Alameda central, el Paseo de la Reforma y Av. Chapultepec, la convierten en una arteria principal.
Esta calle curiosamente se encuentra llena de edificios antiguos con ventanas rotas, y puertas pesadas ya sea de madera o de hierro forjado que parecen fortalezas.
las fachadas han sido castigadas por el sol de medio día que les ha robado el color. Todo en conjunto plasma un encanto antiguo que bien vale la pena visitar
En sus inicios llamada: Paseo Nuevo
Bucareli fue nombraba ”Paseo Nuevo”, sin embargo cambió de nombre cuando su fundador Antonio María de Bucareli y Ursúa le dio su apellido para identificar las joyas arquitectónicas que se pueden ver actualmente.
En tu recorrido debes empezar con el conjunto habitacional “La Mascota”, unos edificios que además de antiguos, son arquitectónicamente fabulosos.
Ocupan tres calles privadas (Ideal, Mascota y Gardenia) en su interior los vecinos podrán contarte grandes historias vividas de familias completas que dejaron huella en la colonia.
Sus nombres son alusivos a los cigarros que la antigua tabacalera “El Buen Tono” elaboraba
Observa los pequeños detalles
Date vuelo tomando fotografías de las fachadas, techos y herrería que son testigos de la fuerza de los materiales de construcción que realmente protegían a las viviendas, no como ahora…
Continuando, y a partir de la esquina con la calle de Barcelona, podrás encontrar una serie de negocios que te distraen la mirada con algunos vidrios rotos producto de algunos maldosos y quizá de algún temblor.
Pero si te vas a los detalles de las fachadas encontrarás desde pequeñas sirenas, deidades, grecas, flores y formas típicas del arte en cantera en época de auge.
El espectacular Edificio Vizcaya
Sigue caminando y te encontrarás con el “Edificio Vizcaya”, una lujosa residencia que sigue conservando su fascinante estilo porfiriano con detalles franceses.
Este lugar fue uno de los primeros edificios que contó con elevadores y sus principales habitantes en esa época eran empresarios y personas dedicadas al espectáculo.
Entra (ya que estás ahí) y pide permiso al guardia para que puedas ver de cerca este imponente conjunto habitacional.
Historia del Edificio Vizcaya
Un secreto: en las ventanas exteriores, sobre los marcos lograrás ver rostros de demonios y personas agonizantes labrados en piedra.
En el número 118 de los apartamentos, sobre la pared existe una serie de mosaicos nacarados que son tremendamente bellos, vale la pena observarlos detenidamente por algunos minutos.
El gran Palacio Cobian
La siguiente parada es el “Palacio Cobián”, casona de los señores Cobián y Fernández, personajes millonarios que poseían esta enorme mansión que hoy forma parte de las oficinas de la Secretaría de Gobernación.
Mientras rodeas y observas la imponente obra arquitectónica justo enfrente se localiza un solemne edificio que destaca por fachada de tezontle rojo y el tallado de su piedra.
Ahí justo en las placas del azulejo encontrarás personajes como Hernán Cortés, Antonio Bucareli y varios más que decoran algunas viejas ventanas (rotas por cierto).
Si miras mas arriba podrás ver en forma de remates a los escudos de distintas ciudades: Guadalajara, Mérida, Puebla, Veracruz, Oaxaca, y otras más.
El reloj chino
En la siguiente esquina aparece el famoso “Reloj Chino”, un monumento donado por el emperador chino Puyi.
Su sencillez acentuada por las manecillas de un reloj preciso, lo convierten en un ícono de la ciudad y punto de referencia.
Un recordatorio para ser puntual
Este pilar ha sido testigo de muchos eventos históricos desde su inauguración en 1910, tal como el daño que sufrió en la Decena trágica.
La reducción de su glorieta debido al tráfico inmensurable de la ciudad y las distintas remodelaciones a causa de su deterioro.
Pero ahí sigue de pie cumpliendo su tarea de servir a los despistados y evidenciar a los impuntuales.
Un poco de su sabor
Entre las calles de Morelos y Atenas se localiza la parte deliciosa de Bucareli.
Cafeterías y puestos de calle con antojitos en donde empresarios, burócratas y empleados comparten un espacio para descubrir sabores tan clásicos como los de hace 60 años.
Si estás en alguna mesa del “Café la Habana” observa las fotografías en blanco y negro de la pared, imágenes que muestran el paso de los años y te remontan a un viaje de varias décadas atrás.
El “Café Brujas” tiene en su ventana una colección de diferentes tazas que puedes mirar desde la calle, y si lo tuyo es tomar un delicioso café, entra y pide uno para consentirte.
¿Que esperas para darte un antojito?
Pide sentarte en alguna mesa con vista a la calle para que desde ahí puedas admirar la belleza de algunos edificios que se encuentran de frente, mismos que tienen herrería trabajada de forma caprichosa.
No pierdas de vista los portones de madera que han retado a las polillas, y las ventanas rotas que parecen agujeros del tiempo suspendidos en las paredes.
Ya más relajado con ese cafecito, sigue tu paso a la última manzana de la calle, es decir a la conocida “Esquina de la Información” donde los periódicos más antiguos de nuestro país tienen su sede.
El porfiriato también se hace presente
Su estilo porfiriano contrasta con algunos murales urbanos que puedes ver si alzas la mirada a la Calle Bucareli en la CDMX .
Con casi cien años de existencia “la Catedral de la Prensa” como se denominó al Edificio de “El Universal” es sublime y el de “El Excélsior” no se queda atrás, sobre todo con esa decoración de lámparas y balcones.
Finalmente llegarás a Paseo de la Reforma y es justo ahí donde te preguntas ¿Qué más ver?. Está “El Moro” el primer rascacielos de México, que hoy en día es sede de la Lotería Nacional.
También encontrarás la moderna “Torre del caballito”, que es precedida por la que se encuentra en el Palacio de Minería hecha por Manuel Tolsá.
Disfruta de una tarde en esta bonita calle
Si prefieres visita el Monumento a la Revolución que puedes ver desde esta esquina para pasar el resto de la tarde.
Como verás en un día podrás disfrutar de una sola arteria de La Ciudad de México que guarda historias fascinantes, arquitectura contrastante, monumentos emblemáticos y gastronomía típica.
¿Cuántos días necesitamos para descubrir esta magnifica ciudad? Sigue leyendo El Souvenir, toma decisiones. Y recuerda, #Nuncadejesdeviajar