Muy cerca de Kyoto en Japón, existe un excelente lugar de esos que te transmite la mayor tranquilidad que todos estamos buscando en un viaje por Asia: “El Bosque de Bambú Sagano Arashiyama”.
Un lugar que sólo de ver las fotografías puedes observar la armonía paisajista que caracteriza a los japoneses. Ejemplo de ello son sus perfectos jardines que en todo Japón son comunes. Tanto en templos como en parques y por todas las calles de todas las ciudades, pues es una costumbre y una cultura.
¿Dónde se encuentra el Bosque de Bambú?
Cercano al Monte Arashiyama en medio de una ciudad campestre, se encuentra este remanso convertido en bosque. Dependiendo de la hora en que lo visites, te asombrará con el cambio de tonos.
La vegetación juega con las luces del sol y por las noches se ilumina con luces artificiales, hace que cualquier hora se antoje especial para ir. Para pasear por el Bosque de Bambú en Japón se puede hacer de varias formas.
Se me ocurre un paseo solitario con el objetivo de la contemplación. Incluso a veces en un viaje queremos tener un momento de meditación y por qué no decirlo, de melancolía.
En donde la belleza extraña del lugar nos muestre que hay cosas por las que hay que asombrarnos y seguir adelante. Eso créeme sirve mucho y es un encuentro contigo mismo.
Una visita romántica
Por otro lado, el bosque es ideal para ir acompañado de la persona que te gusta, que amas o que apenas estás descubriendo y el lugar es como una sorpresa que ambos comparten y se sorprenden al mismo tiempo.
Ideal para declarársele a alguien enfrente de esos gigantes, tal vez sellarlo con una marca en uno de los árboles que con el tiempo crecerán buscando el cielo y consigo, tu marca. Me pregunto ¿Cuántas parejas de novios lo habrán hecho así?
Quizá otro tipo de recorrido sea haciendo senderismo o corriendo por la mañana en una actividad saludable. Con tu ropa deportiva disfrutando la música en tus oídos y con ese escenario verde saludable, así si dan ganas de ejercitarse.
Hay un momento muy especial en donde el viento juega con el movimiento de los bambúes y pasa entre ellos, un sonido peculiar que Japón lo ha nominado entre los 100 sonidos del país que se deben preservar.
Puedes aprovecharlo de muchas maneras
Fotografía, observación de aves, lectura de un libro, paseo en carruaje con la familia. En fin cualquiera que sea el objetivo, el Bosque de Bambú en Japón ofrece siempre el mejor escenario y sensaciones para la ocasión.
Verlo gris es como entrar en una fotografía del pasado, por las noches iluminado guarda un secreto romántico y encantador, por las mañanas hay un juego de sombras. Pero definitivamente los atardeceres son los mejores.
Cuando los rayos del sol atraviesan esas enormes estacas para dar un resplandor de luz que no pueden faltar los japoneses maravillados sacando sus teléfonos celulares para atrapar el momento.
Y es que el Bambú es un material muy resistente, básico en los países asiáticos para la construcción de viviendas, fabricación de papel, medicina y productos de la vida cotidiana como palillos, tazas cajas y canastas, hasta la elaboración de cerveza.
Por algo se le conoce como “la planta de los mil usos”. Es como rendirle un homenaje al árbol, el bosque cuenta con más de 50 especies diferentes de bambúes algunos con más de 25 metros de altura y 30 cm. de diámetro.
Un bello paraíso natural con mucha historia en el Bosque de Bambú en Japón
Sus senderos guardan todas historias de las personas que los anduvieron desde las más humildes hasta los aristócratas de Japón que por mucho tiempo utilizaron el bosque como espacio de silencio, paz y exclusivo de la familia real nipona en periodo Heian (785-1185) cuando Arashiyama era un destino no muy popular.
Arashiyama es un lugar encantador sobre todo en el colorido otoño cuando el Bosque de Bambú en Japón cambia sus tonalidades y por otro lado en primavera cuando los cerezos se convierten a flor con un espectacular momento rosado.
No olvides visitar el templo Tenryu-ji o “templo del Dragon Celestial”, tomar un paseo por el río, y visitar sus tiendas y restaurantes que le dan un toque especial.
Dicen por ahí que alguna de las cosas que debes hacer en la vida es sembrar un árbol, y este bosque refleja el cielo que se ganaron las personas que lo idearon y lo sembraron.
Sin duda vale la pena dar un gran recorrido en este Bosque de Bambú en Japón. No olvides agendarlo en tu próxima visita a Arashiyama, y recuerda, #NuncaDejesDeViajar.