En el vibrante corazón de Acapulco se encuentra el Jardín Botánico “Esther Pliego de Salinas”, un verdadero museo de plantas vivas dedicado a la propagación, conservación y preservación de la biodiversidad.
Este oasis ecológico, que funciona como pulmón verde para el puerto, celebra más de dos décadas de compromiso con la naturaleza y la educación ambiental.
Un santuario que ha sobrevivido a Otis
Desafortunadamente, el huracán Otis impactó duramente este refugio natural, destruyendo el 80% de sus árboles más antiguos y afectando gravemente a la flora nativa y endémica, incluyendo palmas y especies diversas de sus colecciones.
No obstante, a solo cinco meses de este desastre natural, el Jardín Botánico de Acapulco muestra un impresionante espíritu de resiliencia. Hoy, el jardín ha reabierto parcialmente algunos de sus senderos, permitiendo que visitantes y locales puedan volver a disfrutar de la impresionante flora y belleza paisajística que ofrece este paraíso.
La variedad de especies que alberga es vasta, incluyendo palmas, heliconias, bromelias, crotos, plantas de sombra, desérticas, acuáticas, zamias y cycas.
Todos estos elementos se combinan para crear un ambiente de inmersión total en la selva tropical, promoviendo un espacio de recreación y aprendizaje para visitantes de todo el mundo.
El jardín no solo se centra en la flora, sino también en la accesibilidad. Con la instalación de un elevador, personas con discapacidad y adultos mayores pueden fácilmente acceder y disfrutar de la espectacular vista de la bahía desde una plataforma a 13 metros de altura.
Ubicado en las Cumbres de Llano Largo, y a pocos minutos de la Base Naval, el Jardín Botánico ofrece una entrada conveniente para todos los visitantes, $70.00 pesos en admisión general, $30.00 pesos para
maestros y estudiantes y $900.00 pesos por recorridos guiados de 1 a 6 personas y los domingos recorrido gratis pagando la entrada general.
Esta entrada es un donativo que ayuda a a la conservación del lugar. La entrada es libre para menores
de 10 años, adultos mayores con credencial de INAPAM y estudiantes de ULP con credencial vigente, por último los martes la entrada es libre.
Los Pilares del Jardín Botánico de Acapulco
Desde su inauguración, el Jardín Botánico de Acapulco ha demostrado un compromiso firme con la educación ambiental y la participación comunitaria.
A través del programa “Mini naturalistas” y diversos cursos de verano, ha acogido anualmente a más de 2,000 estudiantes de escuelas locales y del estado.
Estos programas no solo incluyen recorridos educativos sino también talleres didácticos que fomentan el respeto y conocimiento sobre el medio ambiente. La participación de estudiantes universitarios es notable, con muchos de ellos realizando su servicio social y participando en estudios cruciales de flora y fauna.
Además, el Jardín ofrece una variedad de cursos que van desde artesanías y diseño floral hasta jardinería básica y poda de árboles.
Estos cursos están abiertos tanto para la comunidad local de Cumbres de Llano Largo como para el público en general, fomentando así una cultura de conservación y respeto por la naturaleza.
Logros y reconocimientos
A lo largo de los años, el Jardín ha alcanzado logros significativos en la conservación de plantas en peligro de extinción, con especial atención a especies como el Palo morado y el Palo de cera a través de su Unidad de Manejo Ambiental (UMA).
Los esfuerzos han sido reconocidos tanto a nivel nacional como internacional, haciendo del Jardín Botánico un destino turístico destacado y un modelo de conservación ambiental.
En 2021, fue honrado con el reconocimiento de “Parque del Mes” por la Asociación de Parques de México, y ha sido sede de eventos importantes como la XXI Reunión Anual de la Asociación de Jardines Botánicos Mexicanos.
El Jardín Botánico de Acapulco es un centro de comunidad y aprendizaje donde se celebran fiestas tradicionales y se fomenta la participación activa de todos los sectores de la sociedad.
Con cada visita, los visitantes no solo disfrutan de la belleza natural y la biodiversidad, sino que también se convierten en parte de un movimiento más grande hacia la sostenibilidad y el respeto por nuestro entorno natural.
Este lugar representa no solo una oportunidad para explorar la rica biodiversidad de Acapulco, sino también para testificar la resilencia de la naturaleza y el espíritu humano frente a adversidades.
En tu próxima visita a Acapulco, asegúrate de visitar el Jardín Botánico, un lugar donde la belleza natural y el esfuerzo humano se unen para crear el espacio más espectacular y enriquecedor de la región. ¿Viajas a Acapulco? Entonces te sugerimos darte una vuelta en la pagina oficial de Autotur, en donde vas a encontrar todo lo relacionado con transporte seguro, cómodo, y con paquetes que se ajustan a tu presupuesto. Y recuerda, #Nuncadejesdeviajar!